Reflexionan sobre los festivales de cine, en el BAFICI
Emilia Pugni Reta
mepugnireta@gmail.com
Buenos Aires. En el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), que se celebra en la capital argentina, además de mucho cine independiente hay conferencias con figuras destacadas del ambiente cinematográfico. El Auditorio Espacio BAFICI es uno de los lugares donde suceden esas charlas. Entre ellas, es importante la propuesta que el Festival ha denominado Mesa Industry Office, y la primera de esta serie fue Festivales internacionales de Cine: criterios de selección y programación.
Entre los participantes de dicha mesa estuvieron Tiziana Finzi, Directora Artística del Festival Internacional de Cine de Miami; Jean-Pierre Rehm, Director del Festival Internacional del Documental de Marsella; Javier Martín de la Quincena de Realizadores de Cannes, y Sergio Wolf, director artístico del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente, quien fungió también como moderador.
Martín fue el primero en tomar la palabra explicando que la Quincena busca películas que no se inscriben a los festivales, que no hayan sido proyectadas en el territorio de origen. “Apostamos a gente que tiene una mirada personal, que le muestre al público algo que no haya visto antes. A diferencia de la Semana de la Crítica, sí apuntamos a directores ya reconocidos”.
Finzi, más visceral, defendió a la curiosidad como calidad del programador y aceptó que es necesario revisar la selección de otros festivales aunque no descartó llevar a Miami films que ya hayan sido pasados en otros eventos de este estilo. “Las películas en los diferentes festivales adquieren valores distintos”.
“Mi criterio tiene que ver con el punto de vista del director, también me gustan las producciones donde no se entiende si lo que estamos viendo es un documental o una ficción”, aclaró Tiziana Finzi.
Rehm, por su parte, explicitó que el Festival de Marsella tiene una línea editorial que sigue sin concesiones: separar los documentales de las ficciones. “Buscamos películas que no hayan sido muy costosas en su producción y nos interesa ayudar a que desarrollen una vida útil. Por eso nuestro criterio de selección tiene que ver con encontrar películas que para nosotros van a durar y con personas que estén luchando para conseguir sus cometidos”.
Según Rehm, los festivales han cambiado y han pasado de la simple exhibición a enriquecerse con la distribución.
El auditorio, conformado por argentinos, colombianos, mexicanos, franceses y demás nacionalidades que confluyen en la edición número doce del BAFICI, preguntó si la proliferación de festivales genera competencia a la hora de seleccionar material. Finzi contestó que no: “Lo que buscamos es apoyar al cine que no pertenece a las mayors y hay mucho. Lo que si sucede es que algunos de los más importantes eventos, principalmente europeos, piden la premier de alguna película, pero no afecta demasiado”.
Para los que tienen el privilegio de estar en Buenos Aires, además de comprar tickets para las películas, aconsejamos echar un ojo a la última página del programa del Festival y sacarle el jugo a estas actividades gratuitas.
