Las memorias del recién fallecido productor mexicano Alfredo Ripstein (1916-2007) , quien realizó películas como “El crimen del padre Amaro” y “El callejón de los milagros” , serán publicadas a fines de este mes bajo el título de “Churubusco Babilonia” , informó su hijo, el director de cine Arturo Ripstein.


El realizador asistió anoche a la Cineteca Nacional donde se celebró un homenaje póstumo a su padre, quien falleció el pasado 20 de enero a los 90 años.


Arturo Ripstein dijo a la prensa que las memorias no las escribió propiamente su padre sino que son una recopilación de las largas conversaciones que mantuvo el productor con el crítico de cine Nelson Carro, que es el responsable del texto.


Publicadas por ediciones El Milagro, las memorias constituirán, según su hijo, “una especie de viaje en el que habla de sus cuentos, anécdotas, lo que le gustaba y le divertía” .


Ripstein dijo de su padre que fue un hombre que “vivió feliz y murió en paz” y recordó que de niño lo vio muchas veces elegir vestuarios, seleccionar “locaciones” (lugares para realizar las tomas) , contratar actores, aprobar fechas, angustiarse con las cuentas y embelesarse con el cine, los actores, cantantes y las luces.


“Ahí entre rumberas y charros, cabaret de cartón piedra y balcones de mampostería, eterno olor a pintura y pegamento, mi padre se convirtió en productor de golpe y porrazo. Sin boleto de vuelta decidió nunca más salir de los estudios y lo cumplió” , dijo Ripstein hijo.


“Sesenta años después seguía en el cine, la muerte lo encontró en el cine” , agregó el director de cintas como “Principio y fin” (1993) o “La virgen de la lujuria” (2002) .


Ante los asistentes al homenaje, Arturo Ripstein reconoció que trabajar con su padre era muy difícil “porque nos volvía locos” .


Incluso una vez, hace más de cuarenta años, el Nobel colombiano Gabriel García Márquez le llevó el guión de “Tiempo de morir” , que cristalizó en una película realizada en 1965.


Aunque Arturo Ripstein consideró que el texto era “muy lindo” , su padre le dijo a García Márquez que había “que trabajarlo” .


Ante una respuesta “tan contundente y ambigua” , “nos salimos de ahí (el Nobel colombiano y Ripstein hijo) para ponernos borrachos para ver cómo podíamos subsanar esa orden” .


Preguntado sobre cuál era la película favorita de su difunto padre dijo que, “sin lugar a dudas” , “El callejón de los milagros” (1995) , protagonizada por Salma Hayek.