Nayarit, norte de México. La hidroeléctrica El Cajón termina de construirse. El agua retenida empieza a subir. En unos días un pueblo entero se hunde. Lo llamaban El Ciruelo. Su iglesia, sus muertos, sus campos, sus casas quedaron bajo el agua. El gobierno les prometió una vida mejor con la represa y les construyó casas nuevas, sin tierras… (IMCINE).