Por Jean-Pierre Garcia
En Exclusiva desde Cannes
Cada año, al entrar en la gran Sala Lumière (con sus 3,300 butacas), se espera algo nuevo, algo inédito. Este círculo mágico del séptimo arte es casi inaccesible para un simple crítico de cine… a menos que vista de smoking y pajarita (los hombres) o un vestido de alta costura (las damas). Los demás —como nosotros— seguimos la ceremonia desde el cine Debussy (1,800 butacas) o en pantallas gigantes, libres de los interminables flashes y aplausos.
Al subir al escenario, la presidenta del jurado, Juliette Binoche, y los otros nueve miembros —entre ellos, el mexicano Carlos Reygadas, impecable en su smoking— recibieron una ovación. Su presencia demuestra que armar un jurado en Cannes es un arte diplomático. ¡Hay que felicitar a Reygadas por aceptar esta tarea que honra a México y su cine!
Cannes también es el lugar de los discursos: algunos llenos de autocomplacencia, otros de sobriedad. Este año, prevaleció el compromiso. Binoche leyó un poema escrito por Fatma Hassouna, la cineasta palestina asesinada en Gaza, cuyo testimonio aparece en el documental de la iraní Sepideh Farsi. Entre las 400 firmas que apoyaron el homenaje, estaban las de Virginie Efira, Alfonso Cuarón, Javier Bardem, Pedro Almodóvar, Justine Triet y Laure Calamy. «Fatma debería estar aquí con nosotros esta noche —dijo Binoche—. El arte es el testimonio más poderoso de nuestras vidas y sueños. Como espectadores, la besamos fuerte».
La ceremonia también rindió tributo al maestro David Lynch. Mylène Farmer, su amiga de siempre, interpretó una canción en honor al creador de Twin Peaks y Mulholland Drive. Pero los aplausos más estruendosos llegaron cuando Leonardo DiCaprio entregó la Palma de Oro Especial a Robert De Niro. La emoción fue tan intensa que ambos lloraron… y hasta los críticos en el Debussy —que “no deben mostrar sentimientos”— contuvieron las lágrimas. Todos celebraron la lucha de De Niro contra el fascismo (“¡F…k Donald Trump!”).
Finalmente, Quentin Tarantino declaró: «El 78° Festival de Cannes está oficialmente abierto».
