Por Hugo Lara
El director alemán Edward Berger ya había alcanzado buenas notas con su adaptación del clásico “Sin novedad en el frente” (Im Westen nichts Neues, 2022) que ganó cuatro Oscar, incluyendo Mejor película en lengua no inglesa. Este año nuevamente atrae los reflectores con su más reciente filme, “Cónclave” (Conclave, 2024), un drama basado en una novela de Robert Harris y adaptado por Peter Straughan, que gira en torno a las intrigas en el interior del Vaticano durante la reunión de cardenales para proclamar un nuevo papa.
La trama tiene como punto de partida la muerte de un papa que da pie a organizar el cónclave para elegir un sucesor. La responsabilidad de este solemne y hermético proceso corresponde al cardenal Lawrence (Ralph Fiennes), quien tiene qué vigilar que todo se desarrolle de forma impecable, con la asistencia y voto de más de un centenar de cardenales de todo el mundo. Entre ellos, figuran los candidatos de los grupos más conservadores como el italiano Tedesco (Sergio Castellitto) o el canadiense Tremblay (John Lithgow), así como de sus oponentes del ala liberal representado por Aldo Bellini (Stanley Tucci) o, en un punto intermedio, el nigeriano Adeyemi (Lucian Msamati).
Durante el cónclave, que se prolonga varios días a puertas cerradas, se va sumando sorpresa tras sorpresa. Primero, la llegada de un invitado de última hora, el cardenal de Kabul, el mexicano Benítez (Carlos Diehz), nombrado en secreto por el papa por razones de seguridad. Posteriormente, Lawrence va descubriendo graves turbiedades que encubren algunos de los favoritos, por lo que tiene que tomar medidas para evitar mayor escándalo y asegurar que el nuevo papa no tenga mancha alguna que perjudique a la Iglesia católica.
Cada cierto tiempo, es inevitable que el cine dirija sus cámaras al Vaticano, ese lugar sagrado por los católicos que es, al mismo tiempo monumental, enigmático y cargado de simbolismos. Por ejemplo, vale la pena recordar “El Padrino III” (1990), donde Coppola elabora un thriller alrededor de la muerte del papa Juan Pablo I. Y hace relativamente poco, pasó por las pantallas “Los dos Papas” (The Two Popes, 2019), dirigida por Fernando Meirelles, que tuvo una positiva acogida de crítica y público. Esta ocasión, el director Berger consigue una atractiva reconstrucción del mundo interior del Vaticano, donde solo habitan hombres y mujeres religiosos. Además, en “Cónclave”, se adicionan elementos de intriga política, cuando se echa a andar la maquinara para elegir al nuevo papa, una de las figuras más influyentes del orbe. Y no es que esa reconstrucción ficticia sea necesariamente fiel a la realidad, no lo sabemos, pero su planteamiento es consistente y posible.
Es allí donde se mira el choque de las posiciones progresistas contra las conservadoras y tradicionalistas, exhibiendo el estado de la política actual no solo del Vaticano sino de todo Occidente. El ajedrez político es uno de los ganchos que tiene esta trama, enriquecida también al momento de mostrar las personalidades de estos hombres virtuosos, pero que no escapan de la ambición, la cobardía y la hipocresía.
Igualmente, el director y su equipo (fotografía, diseño de producción, vestuario) hacen un meticuloso trabajo en la creación de ambientes y atmósferas, para dar vida a la fría intimidad del Vaticano, entre sus grandes espacios de mármol y sus rincones íntimos menos imaginados. Además, logra un trabajo sobrio pero visualmente poderoso, que aprovecha las texturas y los colores, como el rojo del vestuario cardenalicio. Así consiguen varios planos y secuencias de gran plasticidad, donde entran al juego los contrastes y la simetría, las formas de las pinturas del barroco, además de la poderosa música.
La película resulta muy entretenida, con giros de tuerca que le van dando cuerda a la trama hasta su gran final. Todo ello está muy bien sostenido con las actuaciones del estupendo cuadro actoral, con Fiennes a la cabeza y los ya mencionados, pero además Isabella Rossellini en un pequeño papel que le ha dado una nominación, y al mexicano Diehz, quien se ha revelado como un actor a seguir. Con 8 nominaciones al Oscar, incluyendo Mejor película, es un hecho que dará pelea por conquistar varias estatuillas.