Carolina G.Guerrero
Noticine-CorreCamara.com

San Sebastián. Una anodina rueda de prensa, en la que no hubo preguntas dignas ni
respuestas medianamente inteligentes rubricó el esperado -y retrasado
media hora sin justificación- encuentro de Julia Roberts con la prensa
por “Come, reza, ama”. ¿No era por el premio Donostia? Bueno, si, pero
no. Se trataba más de promocionar la película que a la receptora de un
premio que se le ha dado única y exclusivamente por estar disponible
por Europa en gira promocional orquestada por la Columbia-Sony para
lanzar esa cinta en concreto.

La oscarizada actriz fue cortés, pero ante la irrelevancia o
impertinencia de las preguntas contestaba a ese mismo nivel. La
presencia de su colega Javier Bardem y del actor Richard Jenkins así
como del director del film Ryan Murphy desnaturalizó lo que debía ser
una rueda de prensa de Premio Donostia, centrada única y exclusivamente
en su receptora y en la totalidad de su carrera, más que la no
demasiado relevante en el conjunto de su trabajo “Come, reza y ama”,
pero quedó patente el verdadero carácter de este concreto premio fruto
de una negociación con Columbia y no directamente con la actriz Julia
Roberts. Lástima…

La
expectación era máxima a primera de la tarde en el Kursaal por ver a
Julia Roberts, que había llegado la víspera, ya caída la noche del
domingo. Pese a las suspicacias por el carácter reservado del español
Javier Bardem y su muy reciente anuncio de paternidad, estuvo el actor
español bastante más parlanchín e incluso distendido que Roberts,
aunque no falto la complicidad entre los dos.

Comentaron tanto
uno como otro que antes de comenzar el rodaje de “Come, reza, ama”
tuvieron la oportunidad de conocer a los protagonistas reales de la
historia que interpretaban y que les dieron permiso para sentirse
libres a la hora de interpretarlos.

Javier Bardem bromeó al
comentar que conoció al brasileño Felipe, al que interpreta, y que no
entiende porque le eligieron a el para el papel ya que este “es un tipo
atractivo”. También comentó que  para prepararse y parecer un autentico
brasileño tuvo a un buen profesor, que sobre todo pulió el ingles con
acento brasileño.

Julia Roberts ya había leído el libro de
Elisabeth Gilbert, cuando le ofrecieron este guión, y no lo dudó, y a
la pregunta de un periodista comento que no se siente encasillada y
echa mano de su instinto para dar el sí o no a cada nuevo guión.

A
todos los presentes de la multitudinaria rueda de prensa no les ha
parecido que el Premio Donostia de este año haya estado especialmente
generosa con los medios. Sabemos que las comparaciones son odiosas y
“Pretty woman” siempre sera “Pretty woman”, pero estrellas como Meryl
Streep y el propio Brad Pitt en años precedentes, desplegaron toda su
luz y su encanto cosa que este lunes todos hemos echado de menos.

Javier
ha comentado sus nuevos proyectos. En octubre rodará con Terrence
Malick, que para él es un poeta visual y del que le atrae su forma poco
ortodoxa de trabajar, y que para él es más fácil rodar en Estados
Unidos que en Europa, ya que allí es siempre un extranjero.

Julia
agradece que el premio se lo haya dado precisamente Bardem y comenta
que esto le ha dado cierta seguridad, ya que sabe que en ese momento le
temblarían las piernas y así se sentiría muy segura a su lado.

Este
cuarto día de festival, se abrió con la proyección de la coproducción
franco-marroquí  “A Jamaâ” (La mezquita), dirigida por Daoud
Aoulad-Syad. La trama nos lleva a un  desierto, en el que después de
que sus habitantes derriban unos decorados que sirvieron de escenario
para una película, sólo dejan en pie el que sirvió para representar una
mezquita, que se convierte inopinadamente en lugar de culto religioso
auténtico, lo cual frustra al propietario del terreno que lo había
alquilado justo para el film y ahora lo pierde por la fe religiosa de
sus compatriotas.

Se trata de una historia con trazas
humorísticas, y con posibilidades de convertirse en una cinta sencilla
y simpática, pero la incapacidad de su director para materializar en un
guión sólido una anécdota realmente ocurrida con su previo film frustra
el resultado final.

Bardem y Julia Roberts (PSG)