El reciente Festival Internacional de Cine de Monterrey demostró en su cuarta edición, ser el escaparate más importante en el norte del país al séptimo arte.
Dicha edición se distinguió por un notable incremento de público en las funciones, con respecto al año anterior. Se caracterizó también por la apertura de nuevas secciones, como la de cine hecho en Nuevo León, un encuentro de guionistas y un rally para hacer videos musicales en el cual participaron estudiantes de varias ciudades.
Sin embargo, lo más importante fue sin duda que se incorporara producción de Nuevo León. Seis largometrajes entraron en competencia, que abarcó un abanico de temas, desde el vallenato colombiano-regiomontano (Cumbia Callera, de René U. Villanueva), las barras de fútbol (La Horda, de Luis Gerardo Ramos Rodríguez, que obtuvo mención) hasta un viaje por descubrir la identidad de un soldado enterrado en un panteón (Flores para el soldado, de Francisco Javier Garza Yáñez, que ganó el premio).
Juan Manuel González, director del festival, anunció que para la próxima edición el país invitado será Australia. El director explicó que se buscará “mostrar la diversidad cultural y la potencia cinematográfica” de este país.
La edición que concluyó tuvo como invitado a Argentina, y de este país se homenajeó a la actriz Cecilia Roth.
De igual modo, la cinta argentina La rabia, filmada en la pampa, fue la que obtuvo el premio a mejor largometraje de ficción y mejor interpretación protagónica, “porque abre la posibilidad de hacer nuevas lecturas de la historia”, explicó el jurado.
El actor Víctor Hugo Carrizo recibió ambos premios, en representación de la directora Albertina Carri y la actriz Nazarena Duarte, de ocho años de edad. “Algún día cuando sea grande va a reconocer esto de manera más especial; se lo merece, tuvo una actitud maravillosa”, dijo Carrizo.
Asimismo, Hoy, el día se repite diferente ganó el galardón a mejor largometraje documental. La película española narra los últimos meses de vida de un adicto.
De acuerdo a Xavier Baig (codirector, junto con Óscar Moreno), se hizo un documental en el que se podía ensalzar el humanismo de un personaje y ensalzar la brutalidad de un personaje que también fue traficante de drogas, que supuestamente había infectado a gente con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH).
El premio de la audiencia fue para la austriaca Revancha, de Götz Spielman.
Respecto a la producción cinematográfica de Nuevo León, la ganadora en la categoría de largometraje fue Flores para el soldad.
Al recibir el premio, el joven director Francisco Javier Garza Yáñez comentó que quería enviar un mensaje “al gobierno y los empresarios para que sigan apoyándonos, a los jóvenes a que sigan creando y a los veteranos para que sigan educándonos”.
Los ganadores de este evento fílmico regiomontano recibieron una cámara de video de alta definición y cinco latas de 35mm de 400 pies cada una. Para los galardonados en las secciones de Nuevo León hubo además un premio monetario (largometraje: 100 mil pesos, y corto, 10 mil pesos).