Los tres cortometrajes ganadores del Ariel 2012

Por Adriana García / Foto: Juan Briseño

En los últimos años, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias
Cinematográficas A.C (AMACC) ha atravesado por diversas crisis, desde
económicas hasta de credibilidad; Carlos Carrera, su actual presidente,
infiere que no sólo es un problema de la Academia, sino de la industria
cinematográfica en general. En la pasada entrega del Ariel declaró que
es necesario pugnar por “un lugar en nuestro propio mercado”; esto
debido a que muy pocas películas mexicanas llegan a las salas de cine.

Sin embargo, este mal no sólo lo padecen los largometrajes, los
cortometrajes carecen de una exhibición comercial y son condicionados a
ser exhibidos en secciones especiales en los festivales
cinematográficos. El cortometraje es una de las primeras plataformas por
la que pasan los cineastas; debido a que dura sustancialmente menos que
una película de producción normal, otorga a los creadores mayor
libertad para experimentar con cada elemento a su alrededor.

“Prita Noire”; “Yuban” y “Mari Pepa” ganaron como mejor corto de animación, documental y ficción, respectivamente

Los grandes cineastas iniciaron su carrera realizando este tipo de
producciones; tal es el caso de Alfonso Cuarón quien fuera guionista y
fotógrafo de cortometrajes como “La divina Lola” (1984); por su parte,
Guillermo del Toro armado con una cámara super 8 prestada, realizó su
primer corto en 1983 (“Matilde”), al que le siguieron otros como
“Pesadilla”, “Pesadilla II”, “Ritual Rutina” y “Doña Lupe” (1985); el
mismo Carrera triunfó con su corto de animación “El Héroe” al obtener la
Palma de Oro en el Festival Internacional de Cine de Cannes en 1994.

Durante la entrega 54 de los premios Ariel, juventud y experiencia se
encontraron en las categorías dedicadas a cortometraje; nombres como
Samantha Pineda, Xavier Velasco y  León Fernández se mezclaron con
cineastas más experimentados como Juan Manuel Sepúlveda (“La frontera
infinita”, 2007). Este año los ganadores fueron “Prita Noire” de Sofía
Carrillo al mejor cortometraje de animación; “Yuban” de Ya´Asib Vázquez
Colmenares en cortometraje documental y Samuel Isamu Kishi Leopo por
“Mari Pepa” en la categoría cortometraje de ficción.

Hablemos un poco del trabajo de estos jóvenes cineastas.
Sofía Carrillo es Licenciada en Artes Audiovisuales por la Universidad
de Guadalajara, se desempeña en las áreas de dirección de arte y
animación clásica. Ella misma menciona que “era una niña fantasiosa y
elegí estudiar algo que me permitiera llevar a la realidad los mundos
que me imaginaba”. Con “Vértigo”, su primer cortometraje de animación en
35 mm, se hizo acreedora a una beca del programa Estímulos a la
creación y al desarrollo artístico en Jalisco (2003). Con su segundo
cortometraje “Fuera de control”, se presentó en diversos foros
cinematográficos incluyendo el festival de Sundance en 2009. En 2011
inició una exitosa corrida de festivales con “Prita Noire” en el
Festival Internacional de Cine de Guadalajara donde ganó la categoría
Espectadores del Futuro.

Ya´Asib Vázquez Colmenares egresado del Centro de Capacitación
Cinematográfica deja a la vista la preocupación de los cineastas por
mostrar las realidades de las comunidades indígenas en México. Para este
joven director, lo más importante de este proyecto fue el trabajo
colectivo en donde las experiencias se pudieron compartir. “Yuban” 
(“Tierra viva”) habla de la transformación de una comunidad zapoteca;
retrata la nostalgia de un principio de vida que está por extinguirse y
el esfuerzo de los pobladores por mantener viva su cultura.

También egresado de la Universidad de Guadalajara, Samuel Isamu Kishi
inspirado en su abuela y el  barrio donde creció, presenta “Mari Pepa”
que inició su corrida de exhibición en el 26 del Festival Internacional
de Cine de Guadalajara, en el cual resultó ganador a Mejor cortometraje
de ficción. Samuel tuvo que enfrentarse al reto de trabajar con personas
que no eran actores, a pesar de ello logró que las actuaciones fluyeran
naturalmente.

“Mari Pepa” también resultó ganador en el Festival de Morelia, lo que
le permitió participar en la reciente edición del Festival de Cannes.
Actualmente, Samuel se encuentra trabajando en la pre producción de su
ópera prima que trata de la segunda parte de “Mari Pepa”. 

Como podemos observar el cortometraje poco a poco tiene una mayor
participación en la exhibición; sin embargo, en nuestro país sólo
existen siete festivales o muestras dedicados exclusivamente a la
proyección de cortometrajes como es el caso del Short Shorts Film
Festival. El poder cortometraje reside en la capacidad de contar una
historia en poco tiempo y la calidad de estos proyectos merecen que
existan mayores y mejores plataformas para su exhibición.

Si bien se exige que la exhibición y distribución del cine nacional
sea parte de la agenda política, es necesario que se incluya al
cortometraje para que sus creadores sean reconocidos e incentivados. No
habrá que perderles la pista a estos nombres que comienzan a escucharse
fuerte en los circuitos cinematográficos porque ellos serán quienes, en
breve, colocarán a la cinematografía nacional en el plano internacional.