Por Raúl Miranda

“Soy la mujer que sola nací. Soy la mujer que sola caí. Soy la mujer que espera. Soy la mujer que examina. Soy la mujer que mira hacía dentro. Soy la mujer que busca debajo del árbol. Soy la nadadora sagrada porque puedo nadar en lo grandioso.” 

El documental de culto inicia con el siguiente letrero informativo en rol, “María Sabina es una mujer indígena de México y nació en 1894 según el registro bautismal de Huautla, población localizada en Oaxaca, zona meridional de México. Huautla está habitada por la raza indígena mazateca que hoy conserva pocos vestigios de su cultura antigua, a excepción de la práctica de un ritual religioso que consiste en ingerir cierta variedad de hongos en ceremonias nocturnas. Los hongos sagrados son suministrados por un curandero que la etnología conoce por Shaman. 

El origen del shamanismo es remoto y en México ya se practicaba en la época prehispánica. María Sabina es Shaman y utiliza los hongos para comulgar con los dioses tribales. Descubierta en 1955 por el investigador R. Gordon Wasson de Nueva York ha sido persona interesante para costumbristas y científicos, dando origen a un nuevo tema: la etnomicología.”  

Acudimos así al testimonio sobre los ritos y las técnicas de la célebre curandera María Sabina, la sacerdotisa del hongo alucinógeno y la más conocida de las chamanas oaxaqueñas:   “Soy la mujer luna. Soy la mujer que vuela. Soy la mujer aerolito. Soy la mujer constelación huarache. Soy la mujer constelación bastón. Soy la mujer estrella, Dios, porque vengo recorriendo los lugares desde sus origen.”  

El documental de Echevarría es una visión de los diversos ritos que se celebran en la Sierra Mazateca al hacer curación con hongos alucinógenos, con la principal representante de este ritual, María Sabina. Recrea la práctica y las concepciones de la medicina tradicional (extracto del libro Cine antropológico mexicano, INAH, Hugo Lara Chávez y Javier González Rubio, coordinadores, 2010)