En su participación en el I Congreso de la Cultura Iberoamericana, el escritor y ensayista mexicano Carlos Monsiváis, afirmó que en la industria del cine de la región existe la idea de que la violencia es el gran lenguaje expresivo de la sociedad y que el cine en EU y Latinoamérica tiende a acentuar su dependencia en temáticas relacionadas con ésta.
Monsiváis, comentó que en los últimos años esta industria ha empezando a alternar con el cine digital por lo que gran parte de las súper producciones empezarán a escasear.
Profetizó que debido a la “inmensa voluntad” de millares de jóvenes que quieren hacer cine, dijo, se buscará transformar la industria y ello obligará a crear nuevas generaciones de actores que respondan a criterios distintos a los que actualmente se desarrollan.
Ejemplo de ello, afirmó, es el largometraje “Amores Perros”, del mexicano Alejandro González Iñarritú.
Por su parte el historiador cinematográfico español Román Gubern consideró que parte de esta transformación que tiene que darse en el cine, principalmente en el iberoamericano, se traducirá en nuevas historias.
“Los guionistas son los que tienen que crear personajes y situaciones nuevas aunque en el fondo utilicen los arquetipos de antaño”, aseveró el catedrático de la Facultad de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Autónoma de Barcelona.
Gubern, quien compartió junto con Monsiváis esta mesa de discusión, dijo que la televisión y el cine norteamericano son el paradigma mundial, pero recalcó que hay un público que exige otro tipo de cine y en esa necesidad es donde las producciones iberoamericanas tienen una oportunidad para desarrollarse.