José María es albañil y Rosa empleada doméstica interna. Son inmigrantes sudamericanos, trabajan en España y desde hace pocas semanas son pareja. Unas vacaciones de los jefes de Rosa permite a José María pasar unos días con ella dentro de la casa, una mansión venida a menos y fantasea acerca de lo que sería una vida compartida. José María tiene una personalidad volátil y una discusión lo lleva a un enfrentamiento físico violento con su capataz, dejandolo sin saber qué hacer.