Por Elisa Lozano  

Para Ernesto, invariablemente  

Desde muy joven Ernesto García Cabral estableció un estrecho vínculo con el mundo del espectáculo. Su experiencia como actor aficionado en su natal Huatusco y su indudable talento, le permitirán relacionarse con célebres figuras de los escenarios teatrales, operísticos, y cinematográficos cuyas efigies inmortalizará en cientos de dibujos. 

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Autor no identificado, Ernesto García Cabral, caracterizado en una representación teatral en Huatusco, Veracruz. TEGC

En sus trazos juveniles, publicados en los años diez del siglo pasado en las páginas de El Heraldo, Frivolidades y Multicolor, se advierte ya la seguridad en el manejo de la línea y su extraordinaria capacidad para captar el gesto de sus retratados. A través de su refinado estilo plasmará a María Conesa, Esperanza Iris, Leopoldo Beristáin y otras figuras del teatro de revista. 

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María Conesa por Cabral, Revista Frivolidades, TEGC.

En la década de los veinte, su efímera incursión como galán de cine en las producciones de Gustavo Saenz de Cicilia Atavismo (1923) y Drama en la aristocracia (1924) le harán conocer los entretelones de la producción cinematográfica. Esa experiencia vital lo marcará definitivamente y le será útil cuando durante la “Época de oro” del cine mexicano (1936-1956) se le solicite  diseñar carteles, preventivos y materiales publicitarios de medio centenar de películas. 

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Recorte de periódico con una crítica sobre el trabajo como actor de Ernesto García Cabral. TEGC:

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25 de febrero de 1955, portada  de la revista Cine Mundial, con una imagen de García Cabral como actor durante la era silente. TEGC.

Inquieto y prolífico, García Cabral marcará también un hito en la recién inaugurada televisión mexicana, cuando en 1952 participe en el programa “Duelo de dibujantes Raleigh” junto a sus colegas Rafael Freyre, Ernesto Guasp y Alberto Isaac. 

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Recorte de periódico sin fecha. Anuncio del programa televisivo Duelo de dibujantes. TEGC.

Para éste último, “El Chango” actuará en su galardonada ópera prima titulada En este pueblo no hay ladrones (1965) en la que  aparece junto a otras figuras emblemáticas de la cultura y el arte mexicano como Luis Buñuel, Gabriel García Márquez, Carlos Monsiváis, Leonora Carrington y Abel Quezada, siendo esta su última aparición en el cine mexicano.

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Autor no identificado. Still. Ernesto García Cabral, en una escena de la cinta En este pueblo no hay ladrones (Alberto Isaac, 1965). TEGC.

En otras entregas continuaremos hablando sobre este gran artista plástico y su relación con el cine nacional. 

Todas las imágenes pertenecen al Taller Ernesto García Cabral, A.C (TEGC)