Críticas negativas para filme de Reygadas en Cannes
Noticine.com-CorreCamara.com
Muchos se preguntan este jueves en Cannes, donde el sol vuelve a reinar, qué hubiera sido de “Paperboy” si a su frente hubiera estado Pedro Almodóvar y no Lee Daniels. Su versión de la celebrada novela de Pete Dexter ha decepcionado como película, aunque la salva al menos en parte una desaforada, divertida, sexy y vulgar Nicole Kidman. La única producción iberoamericana en competencia, “Post tenebras lux”, del mexicano Carlos Reygadas, es por su parte un más y peor de lo mismo, esteticista, sin alma y -lo que es peor- sin historia. ¿Un día perdido?
La bíblica cita “Post tenebras lux” (Tras las tinieblas, la luz) sirve al mexicano Carlos Reygadas para poner título a su nuevo ejercicio esteticista, que pretende transmitirnos en un ambiente surrealista los miedos infantiles en el hostil territorio campestre, a donde acude a instalarse una familia urbana, sentimientos que al parecer eran los del autor en su infancia. El de Reygadas es un cine de sensaciones e imágenes, pero lamentablemente no de historias. Las primeras opiniones de la prensa han sido mayoritariamente negativas. Ya en la sala, abucheos, y luego comentarios tan evidentes como estos: “pretenciosidad hueca por excelencia”, “Oscura, confusa y soporífica… ¡pero que bonito es el campo!”, “Experimental y sin gracia” (twitters de críticos de Le Figaro y otros medios locales).
Poca o ninguna mella hicieron estos comentarios en el años atrás premiado aquí con “Luz silenciosa” quien dijo en rueda de prensa: “Me siento muy halagado de recibir abucheos. Si no me abuchearan, estaría un poco preocupado. Rara vez leo la crítica cinematográfica pero a veces sí y creo que es un halago. Para mí el abucheo es un síntoma de que estoy haciendo cosas que valen la pena”.
Nicole Kidman destaca en la decpecionante “Paperboy”
La competencia camina lentamente a su término aunque los grandes nombres siguen llenando al menos de ilusión las sesiones, una ilusión que con frecuencia se derrite como un sorbete bajo el sol de la Croisette (¡Toma pareado!). Este jueves los focos estaban dirigidos principalmente a “Paperboy”, la película con la que Pedro Almodóvar iba a debutar en el cine estadounidense, un proyecto que antes de llegar a las manos de Lee Daniels (“Precious”) rozó las de Paul Verhoeven.
Nicole Kidman salva “Paperboy”, la película con la que Pedro Almodóvar iba a debutar en el cine estadounidense
La superior novela de Dexter cuenta la historia, parece que con fondo real, de un condenado a muerte por asesinar a un policía (John Cusack) que se ha ganado los favores y las cartas de la madurita “barbie” Nicole Kidman, aficionada a las relaciones con tipos encarcelados. Convencida de su inocencia, ésta recurre a la prensa, en este caso a un par de periodistas, uno de los cuales (Matthew McConaughey) deja Miami para acudir a investigar el caso. Su hermano, un joven repartidor de periódicos (Zac Efron, casi toda la película en calzoncillos), hace de chófer del grupo, y como no podía ser menos se deja seducir por la caliente Nicole. Todo ello ocurre en la sofocante Florida de finales de los 60, donde humedad, calor, sexo y racismo conviven en plenitud.
Tras la aparición del libro, a mediados de los 90, Pedro Almodóvar se empeñó en llevarlo al cine, con la complicidad del guionista y director venezolano afincado en Estados Unidos Sebastián Gutiérrez (“El beso de Judas”). De aquello quedó un libreto que hoy Daniels ha elogiado, pero por el motivo que sea no ha usado. “Almodóvar escribió un borrador, muy interesante. Pero luego abandonó el proyecto por alguna razón, como ocurre muchas veces en Hollywood”, comentó el realizador afroamericano, quien retomó la cinta después de que en 2007 pasara por las manos del holandés Paul Verhoeven, quien posiblemente hubiera logrado una versión aún más provocativa.
De esta “Paperboy” quedará sobre todo la “sucia” presencia de Nicole Kidman, con alguna escena sexual memorable, a distancia con John Cusack en un tórrido “vis a vis”, y con Zac Efron más de cerca. Sin embargo, la película no ha convencido. Sin duda Pedro nos hubiera hecho al menos sonreir de vez en cuando.
“Hizo falta -explicaba la estrella australiana- que me identificara intensamente con mi personaje para interpretarlo de una forma tan cruda. Mi trabajo consiste en dejarme llevar, no funcionar con mis propios sentimientos. Ninguna toma se parecía a las demás, explorábamos sin parar. Yo busco los contrastes y la diversidad. Me gusta expresar mi imaginación: es lo que me hizo convertirme en actriz”.
Photocall – Post Tenebras Lux © AFP