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El actor mexicano Damián Alcázar, uno de los más comprometidos en causas sociales y políticas en el país, salió en defensa de los maestros del estado de Oaxaca, cuyas protestas contra la reforma educativa impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto fueron recientemente reprimidas a balazos, situación que califica de “complicadísima”. “A los maestros tendríamos que cuidarlos. Por supuesto que alentarlos para que se preparen mejor, pero no tratarlos como delincuentes”, dijo a EFE.
El protagonista de películas como “El Crimen del Padre Amaro”, “La Ley de Herodes”, las “Crónicas de Narnia: el príncipe Caspian”, y “Magallanes”, por la que está nominado a los Platino que se entregan el próximo día 24, cree que la posible corrupción en el seno de algunos sindicatos no justifica la criminalización del sector, “que está en defensa de sus derechos”. “Hay que limpiar todos los sindicatos, por supuesto”, pero ello no va a hacerse sacando al ejército a la calle a reprimir a civiles: “Está muy mal la gente que decide emitir esas órdenes”.
El intérprete michoacano ha hecho de su compromiso social una orientación de su carrera como actor. “Al hacer yo películas sobre campesinos, trabajadores, estoy tomando la palabra para hablar por ellos; por eso elijo qué historias contar”, dice en las declaraciones a la agencia española.
Alcázar se muestra de nuevo muy crítico frente al PRI en la poder, partido que caricaturizo en su film “La ley de Herodes”, el cual considera no tuvo pese a su éxito el eco deseado, ya que -opina- “si alguien entendió la película, nadie los habría votado de nuevo”. Agrega que en general, los políticos mexicanos no merecen la confianza del pueblo, puesto que “salen muy ricos después de su mandato. Despojan al país y lo venden”.
El actor está actualmente rodando en Colombia la serie “2091”, tras participar en la cinta animada de Carlos Carrera “Ana y Bruno” y en la comedia dramática “El Hotel”, de Carlos Marcovich, junto a Fernanda Romero y Dolores Heredia. También tiene en cartera otra teleserie en Colombia, “The Substance of Evil”, donde volverá a interpretar a un sacerdote, el padre Antonio Macario, como cuando hizo “El crimen del padre Amaro”.