Por Hugo Lara Chávez

Desde hace poco tiempo que las vacas obtuvieron un ascenso social: dejaron atrás su retrato pintoresco de los botes de leche para apropiarse de un aire cosmopolita que las ha hecho, incluso, estrellas de exposiciones internacionales. Además, sus inconfundibles pieles adornan vestuarios y accesorios en una moda que ha inspirado juguetes, objetos de oficina, souvenires, y más. De modo que las películas estelarizada por vacas, como “La Granja” (Barnyard), no son más que fruto de esta euforia pecuaria, atractiva para el público infantil y familiar que las ven con más simpatía que antes.

Barnyard es la nueva cinta de animación del mismo equipo creativo de Jimmy Neutron: el niño genio (2001), y que derivó en una provechosa sociedad: Nickelodeon y Steve Oedekerk, quien fuera también guionista de cintas como Todo poderoso (Bruce Almighty, 2003) y Ace Ventura: When Nature Calls (1995), que además dirigió. Con La Granja, Oedekerk otra vez vuelve a la animación 3D, en una trama que narra la encrucijada de la bulliciosa vaca Otis, que a la trágica muerte de su padre, Ben, debe replantear su vida y asumir sus responsabilidades como nuevo líder de la granja.

Vacas sagradas

Resulta inevitable hacer una precisión. Entre estas vacas, los machos como las hembras tienen ubres prominentes. Oedekerk, durante una visita a los  Estudios Omation, en Santa Clara, California, nos explica: “Creo que las vacas son muy chistosas, y para responder la gran pregunta sobre porqué le pusimos ubres a los machos, simplemente fue por eso, pues la mayoría de la gente así las identifica”. Y los niños tal vez pasen por alto ese detalle (¿será?), bajo la noción de que a final de cuentas no se espera una película que respete con rigor la anatomía vacuna. Como sea, esa imagen resulta extrañamente cómica.

Durante el recorrido por los Estudios Omation es posible aproximarse al laborioso esfuerzo del equipo de animadores y creativos. En el encuentro, Steve Baker, supervisor de animación, nos explica: “Las vacas no son precisamente fáciles de animar, tienen enormes cuerpos y pequeñas patas,  pero con base en varios experimentos logramos darle naturalidad a sus movimientos, desde luego, dentro del concepto que nos planteó Steve (Oedekerk)”. 

Graham Clark, supervisor del proceso CG, nos asegura que fueron muy meticulosos con las expresiones y los movimientos de cada animal, los cuales crearon casi en su totalidad. “Hay incluso, algunas escenas de multitudes, como en la fiesta del establo, en la que se pueden ver  distintos personajes que aparecen en el fondo, hacen movimientos originales que no se repiten unos a otros, ya sea recibiendo masaje o practicando yoga o Tai chi“.

Los Estudios Omation se ubican en un suburbio con grandes espacios. Adentro de ellos, la figura central la ocupa Oedekerk. Su oficina está repleta de curiosidades, en la que abundan divertidos objetos con formas de manzanas y, desde luego, de vacas. 

Una fábula para el psicoanálisis

La Granja es una fábula sobre la relación padre-hijo, muy conectada anecdóticamente con cintas como El Rey León (The Lion King, 1994) y Buscando a Nemo (Finding Nemo, 2003) y que refiere el trayecto en el que el vástago, en este caso Otis, se transforma y madura luego de que se enfrenta a sucesos que lo afectan emocionalmente y que le hacen comprender a posteriori las enseñanzas de su padre.

Esa carga melodramática es compensada por un conjunto de alegres personajes que lo acompañan en sus aventuras: sus amigos el ratón Pip, el hurón Freddy, el cerdo Pig y el gallo Peck. Además de otros miembros de la comunidad, como la mula Miles,  la vaca Bessy y los gamberros rumiantes Eddy, Igg y Budd.

Lo que pasa en el establo, se queda en el establo

Un sitio especial ocupa Daisy, una vaca embarazada que atrae el interés sentimental de Otis. La contraparte de este armonioso grupo lo representan los coyotes, liderados por el temible Dag, un villano calcado de los estereotipos del género. Entre toda esta fauna tiene fugaces apariciones una singular criatura que baila como torbellino, llamado Wild Mike,  y que los otros animales mantienen la mayor parte del tiempo cautivo. Este bicho parece que pertenece a otra historia, y será lo más subversivo de esta deslactosada fábula, que casi sin querer se coloca en la antípoda del clásico Rebelión en la Granja, de George Orwell.

El relato está integrado como un pastiche de viñetas, donde igual se muestra a Otis y sus amigos en gran fiesta pidiendo pizzas a domicilio o dándole una lección a un niño buscapleitos o conduciendo un auto como desquiciados, o bien la divertida secuencia en la que los animales son sorprendidos en su anómala celebración por el granjero, cuyo asombro es neutralizado con una patada de mula.


La versión en inglés de la cinta comprende las voces de algunos destacados actores como Courtney Cox, Andie MacDowell, Sam Elliot, Danny Glover y el propio Steve Oedekerk.

La voz del eterno crítico

La Granja, como pasa con la mayoría de las cintas de animación, puede complacer al público familiar, pero su nivel ratifica el reciente estancamiento del género y su urgencia por encontrar un nuevo empuje, ya no tecnológico, sino creativo.

De qué se trata

Cuando las personas los dejan solos, los animales de la granja hacen su vida como en cualquier suburbio estadounidense, bajo la vigilancia de su líder, la vaca Ben.  Pero su armonía es amenazada cuando los coyotes hacen de las suyas y ponen en predicamento a la joven vaca Otis.

Por Hugo Lara Chávez

Investigador, escritor y cineasta, miembro del Sistema Nacional de Creadores de Artes (2023). Egresado de la Licenciatura en Comunicación por la Universidad Iberoamericana. Ha producido el largometraje Ojos que no ven (2022), además de dirigir, escribir y producir el largometraje Cuando los hijos regresan (2017) y el cortometraje Cuatro minutos (2021). Fue productor de la serie televisiva La calle, el aula y la pantalla (2012), entre otros. Como autor y coautor ha publicado los libros Pancho Villa en el cine (2023), Zapata en el cine (2019) en calidad de coordinador, Dos amantes furtivos: cine y teatro mexicanos (2016), Ciudad de cine (2011), *Luces, cámara, acción: cinefotógrafos del cine mexicano 1931-2011* (2011), Cine y revolución (2010) como editor, y Cine antropológico mexicano (2009). En el ámbito curatorial, fue curador de la exposición La Ciudad del Cine (2008) y co-curadór de Cine y Revolución presentada en el Antiguo Colegio de San Ildefonso (2010).En el ámbito periodístico, ha desarrollado crítica de cine, investigación y difusión cinematográfica en diferentes espacios. Desde 2002 dirige el portal de cine CorreCamara.com. Es votante invitado para The Golden Globes 2025.