Redacción. El jueves 30 de agosto, la Sociedad General de Escritores de México (Sogem) y la asociación civil El Principio, Cine y Cultura, realizarán un homenaje al cineasta y escritor Xavier Robles por su contribución al cine mexicano, que tiene como fin revalorizar la importancia del escritor en la creación de obras cinematográficas. Aprovechando este acto se hará la presentación del libro facsimilar “Bengalas en el cielo”, nombre original de “Rojo Amanecer”, escrito por Robles y Guadalupe Ortega y cuya versión cinematográfica fue realizada por Jorge Fons, marcando con ello un hito dentro del cine nacional de corte político tras vencer la rígida censura y convertirse en un éxito de público.
Las ventas de este facsimilar tienen el propósito de reacaudar fondos para terminar el documental “La luz del alba”, actualmente en producción, que gira en torno a la resistencia de los pueblos originarios en México, que luchan por la autonomía política y económica, como el caso del municipio michoacano de Cherán. El homenaje a Robles, que tiene una larga y notable trayectoria de 42 años, lleva por título “De Bengalas en el cielo a La luz del alba”.
Fue una producción independiente que inició Xavier Robles y Guadalupe Ortega junto a otros promotores del proyecto, entre los que se encontraban el director Jorge Fons, el actor Héctor Bonilla y la actriz María Rojo, a los que más tarde se sumó el actor Valentín Trujillo, quien los apoyó para salir de un bache financiero. Por temor a la censura, la película fue filmada de manera clandestina.
Pero sin duda lo más atractivo de la cinta es el tema y la audacia de su tratamiento. Hay que observar que, en 1990, año en que se estrenó “Rojo amanecer”, el asunto aún provocaba escozor y era evadido por el gobierno. Además, los encendidos comicios presidenciales de 1988 todavía estaban frescos, tanto como el presunto fraude que llevó a Los Pinos a Carlos Salinas de Gortari, por lo que el momento no parecía propicio para la liberación de la censura política. En este escenario, fue asombroso el hecho de que “Rojo amanecer” no terminara enlatada, y que el gobierno autorizara su exhibición en 1990. Tanto Robles como Ortega tuvieron que emprender una lucha contra la censura de la que salieron vencedores, gracias al apoyo de algunos medios de comunicación y de la producción de la película.
La exhibición de “Rojo amanecer” en 1990 vino de algún modo a cambiar la percepción del público clasemediero sobre el cine mexicano. En su momento, “Rojo amanecer” fue considerada la inauguradora de una nueva corriente dentro de la filmografía nacional, que si bien no poseía enormes atributos de producción, en cambio abría las perspectivas de tratar contenidos antes intocables y, al mismo tiempo, probaba el interés de un amplio sector del auditorio por ver un cine mexicano con estándares de calidad más exigente y con el cual pudiera identificarse a través de sus temas, sus lugares y sus personajes. El éxito fue rotundo.
Robles es dirtector, escritor y actor. En 1976 colaboró al lado de Tomás Pérez Turrent en la adaptación cinematográfica de la cinta “Las Poquianchis” (Dir. Felipe Cazals). A partir de esta fecha se dedicó al guionismo cinematográfico. Tiene en su haber alrededor de 30 guiones filmados de los cuales sobresalen: “¡Qué viva Tepito!” (1981); “Bajo la metralla” (1983) que se hizo merecedora a la Diosa de Plata, otorgada por la prensa especializada mexicana; “Los motivos de luz” (1985), entre otras.
Por su parte, Guadalupe Ortega, pareja de Robles, ha escrito varios guiones y es coautora del guión de “Rojo amanecer”, así como “Muelle rojo” y “Zapata en Chinameca”, entre otros.