Por Leticia Carrillo
Pablo Cruz, cabeza de Canana Films junto con Diego Luna y Gael García Bernal, se presentó en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco para platicar sobre su perspectiva del negocio del cine en México a los asistentes al Curso Hollywood 2-Day Film School que se llevó a cabo el 15 y 16 de agosto.
El productor dijo que es necesario “reactivar la frescura del cine mexicano porque a pesar de que internacionalmente es un foco de atención” por la notable producción nacional que gana premios en los festivales extranjeros, también es prioritario resolver algunos problemas que lo aquejan.
Asimismo, aseguró que hacer negocio con el cine mexicano es “casi imposible” y explicó que esto se debe en buena medida a que la exhibición en nuestro país es “carnívora” pues las cadenas como Cinépolis ó Cinemex se quedan con 65 centavos de cada peso que entra en taquilla, además de que más del 90 por ciento de las salas son ocupadas por filmes estadounidenses.
Por esta razón, Cruz señaló la necesidad de que este eslabón de la cadena del cine nacional sea regulado como en Estados Unidos porque “aunque aquel es el país del libre comercio, tienen protegida a su industria fílmica”.
Pablo Cruz también indicó que en México faltan emprendedores que vean al cine como un negocio y que busquen maneras creativas para poder explotar todas las ventanas de exhibición como el theatrical (o cines); la venta y renta de DVD’s; las diversas modalidades de televisión de paga y abierta, y las descargas por internet; en los diferentes territorios.
El cineasta consideró que antes de escribir un guión se piense a quien –entre público, productores y distribuidores- podría interesar la película que surja de dicho texto.
Por último, Cruz mencionó la importancia de hacer historias universales “porque el cine tiene que funcionar en todos lados”; la pertinencia de rehacer las películas en el proceso de la edición hasta que se obtengan óptimos resultados, así como buscar el perfil del festival al que se quiere acceder para promocionar el filme en el extranjero, lo que le “dará brillo” a su regreso al país.