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A pesar de que recientemente criticaba la falta de riesgo de Hollywood para crear nuevas historias y su excesiva dependencia de las ya conocidas, el realizador Doug Liman ha aceptado la propuesta de Warner Bros. para asumir una nueva versión de la película de John Huston “Escape a la victoria (“Victory”), una de las pocas cintas más o menos exitosas que se han hecho sobre el fútbol. Gavin O’Connor (“Warrior”, “Cuestión de honor / Pride and Glory”) se está encargando de reescribir el guión del film original de 1981, del que fueron autores Yabo Yablonsky, Djordje Milicevic y Jeff Maguire.

La meca del cine no podía mirar para otro lado después de las históricas cifras de audiencia que algunos partidos del actual Mundial de fútbol en Brasil están teniendo en Estados Unidos, país donde hasta ahora el balompié ha sido un deporte minoritario. Sin embargo, quizás en relación con los buenos resultados de la selección estadounidense y el aumento de la población hispana en el país, mucho más “futbolera”, esta vez se han batido récords de audiencias para encuentros de lo que aquí se llama “soccer” (para no confundirlo con su fútbol, el americano, derivación del rugby europeo).

De ahí que Warner haya decidido revivir la historia de aquel discutible clásico en el que actores profesionales como Michael Caine, Sylvester Stallone o Max von Sydow se codearon con verdaderos veteranos del fútbol internacional, como el mítico Pelé, Bobby Moore u Osvalo Ardiles.

La cinta, en la recta final de la carrera del prestigioso John Huston, apenas superó los 10 millones de dólares en Estados Unidos, pero fue un éxito en otros mercados, sobre todo los europeos y latinoamericanos, y aún sigue siendo una referencia en todas las enciclopedias que hablan del difícil maridaje entre cine y fútbol.

La historia de “Victory” estaba lejanamente inspirada por un hecho real, bastante modificado. En la ficción, los nazis organizan en el París ocupado un encuentro entre un seleccionado de prisioneros de guerra aliados y otro de jugadores alemanes. La resistencia francesa planea un rescate de esos jugadores en manos germanas, pero éstos, que ven la victoria en su mano y la posibilidad de humillar a los nazis, renuncian a la huída con tal de vencerles. En la realidad, los alemanes, que habían ocupado Ucrania, entonces parte de la Unión Soviética, montaron una liguilla con varios equipos de diferentes cuerpos de las tropas invasoras, salvo uno, el Start, donde había varios jugadores profesionales ucranianos. Al demostrarse mejores, muchos de aquellos futbolistas fueron torturados y asesinados después del partido en el campo del Dynamo en Lobanovsky.

Doug Liman, que ha brillado en el cine comercial con títulos como “Caza a la espía (“Fair Game”), “Mr. & Mrs. Smith”, “Jumper” o “The Bourne Identity”, y que recientemente estrenaba con resultados no demasiado convincentes “Al filo del Mañana” (“Edge of Tomorrow”), protagonizada por Tom Cruise, se encargará de dirigir la nueva versión.