Por Juan José Saravia AMC
Vicepresidente de la Asociación Mexicana de Cinefotógrafos 

Cuando uno ve películas en cualquier sala de cine, inicia la función, y pocos espectadores saben lo que pasa detrás de la ventanilla de donde emanan los rayos de luz del proyector, pero lo que seguramente si les ha sucedido es que la imagen se vea fuera de foco, es decir borrosas o con poca nitidez, el cuadro desfasado, es decir que vemos las cabezas de los actores cortadas o en la parte baja del cuadro y los cuerpos en la parte superior; seguramente también han experimentado que las personas se ven extrañas, los círculos se ven ovalados, y en muchas ocasiones se ve y no se escucha hasta que el operador del proyector se percata que la proyección está mal y rápidamente se mueven a corregir este detalle, aunque en más de una ocasión tienen que detener la proyección para corregir el error. Desgraciadamente en México es muy común que la proyección esté mal ajustada y nadie se percata de que se podría ver y escuchar mejor o correctamente. 

De igual forma, cuando ves una película transmitida por TV, en muchos casos hay franjas negras arriba y abajo del cuadro (fig 1), cuando se transmite el formato original de la película o sin franjas pero recortando una parte importante de la imagen (fig2).  ¿Cuál prefieres?  En mi opinión personal y seguramente la de todos los realizadores del mundo, la que muestra la totalidad de la imagen.

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Los Televisores “antiguos” que son casi cuadrados son los conocidos como 4×3, es decir que tienen una proporción de 4 unidades en horizontal y 3 unidades en vertical. Al hacer la conversión de proporción (4 dividido entre 3) podríamos decir que la escala es 1.33 a 1, es decir que si tengo una imagen de 1 metro de alto el ancho será de 1.33 metros.      

La televisión de Alta Definición (HD, por High Definition)  adoptó en sus pantallas, en la mayoría de países, la proporción del cuadro de 16×9 es decir 1.7778 a 1, si tuviéramos una imagen de 1 metro de alto, el ancho sería de 1.7778 metros.      

Los problemas comienzan cuando las películas rectangulares hay que proyectarlas en una pantalla cuadrada o una TV transmitida cuadrada verla correctamente en un televisor rectangular. Siempre se tendrá el dilema de qué hacer, ver la imagen completa o llenar la pantalla. En el caso de los televisores de HD que ya son 16×9 entonces las imágenes cuadradas (4×3) se van a ver distorsionadas en horizontal, una constante en muchos sitios públicos, es que la TV estándar por cable se ve achatada porque es una transmisión 4×3 vista en pantallas 16×9.      

Para resolver este dilema los diseñadores y programadores de DVD´s  realizan una pista de imagen distorsionada para que el usuario sea quien escoja la forma en que se proyecte. En casi todos los reproductores de DVD´s y todos los de BluRay existe la opción de programar automáticamente el formato de cuadro si es que se programó el disco con esta opción. La imagen se distorsiona (anaformiza) para que sea el Televisor quién ajusta automáticamente según la preferencia del usuario.      

Este fenómeno de distorsionar la imagen en horizontal es el resultado de no tener un estándar para transmisión en TV y a un temor por parte de las cadenas a que los espectadores crean que se les está desaprovechando el área de su TV. Los DVD´s bien diseñados ofrecen la opción de mostrar la imagen en el formato original, pocos usuarios leen los instructivos de sus equipos y no saben como desplegar la imagen original ocasionando distorsiones indeseables para los que hacemos la imagen.    

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Solución: Distorsionar (Anamorfizar) la imagen (los DVD siempre han podido hacerlo, aunque muchos distribuidores en video no dan la opción, queda la pregunta ¿por desidia, ignorancia o por convencionalismo?)

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Así se vería la imagen en un televisor 4×3 (cuadrado) Simplemente de escala en horizontal el cuadro de 1.85 a 1.33. 

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¿Qué prefiere la gente?, los actores es evidente que se quieren ver como son y no pasar por gordos y chaparros… Hasta la imagen transmitida en 4×3 distorsionado (anamorfizado) favorecería a más de uno.      

En varios países es una práctica común que la TV transmita ya en 16×9 la TV de Alta definición y convierten la señal en anamórfica para que quienes la reciben en TV estándar puedan ver el cuadro completo de sus TV cuadradas (4×3) aunque esté un poco estirada la imagen, pero permite que aquellos que ya hicieron una fuerte inversión en la compra de pantallas anchas 16×9 puedan verlo en el formato original.     

En México desde hace más de 6 años comenzaron a llegar las pantallas rectangulares (16×9), no existe estadística exacta desde ese entonces sobre cuantas pantallas de HD (720P o 1080P) se han vendido, sin embargo los últimos 3 años se han colocado cerca de 2.2 millones de Televisores de pantalla rectangular, de tal forma que un cálculo básico implicaría más de 10 millones de televisores rectangulares en México, de ahí el cuestionamiento: ¿Por qué seguimos produciendo y convirtiendo las películas a un formato cuadrado y no ofrecer una transmisión híbrida a todos esos consumidores que han comprado una pantalla HD?