Por Miguel Ravelo
Desde hace un par de semanas, los cines en México han reiniciando actividades luego de permanecer varios meses cerrados a causa de la emergencia por COVID-19. La oferta cinematográfica ha sido dispareja: pocos estrenos nacionales e internacionales, reestrenos de probado éxito que buscan atraer nuevamente al público a las salas, o películas realizadas hace algunos años que por alguna razón no habían encontrado espacio dentro de la cartelera habitual antes de la llegada de la pandemia. Este es el caso de “Cita sangrienta” (“Double Date”), comedia de horror realizada en 2017 en el Reino Unido y que esta semana llega a las salas mexicanas.
Buena parte de la década de los ochenta fue testigo del surgimiento de comedias de horror que serían las reinas de la cartelera durante meses, e incluso colocarían a sus directores como iconos del género, lugar que muchos de ellos conservan hasta nuestros días. Cintas como “Un hombre lobo americano en Londres” (An American Werewolf in London, John Landis, 1981); “Gremlins” (Joe Dante, 1984) o “La hora del espanto” (Fright Night, Tom Holland, 1985), apostaron por mezclar géneros no siempre reconciliados, como el horror y la comedia, creando obras fundamentales que no han perdido un ápice de su fuerza luego de casi 40 años de existencia.
En décadas posteriores las comedias de horror han tenido épocas de altibajos, pero afortunadamente no al grado de hacerlas desaparecer; directores de todo el mundo siguen demostrando que el horror puede hacernos pasar un gran rato y hasta provocar una buena dosis de carcajadas. En años recientes contamos con afortunados ejemplos como “Krampus” (Michael Dougherty, 2015), heredera directa del mejor Joe Dante, o “Feliz día de tu muerte” (Happy Death Day, Christopher Landon, 2017), una retorcida y muy lograda reinterpretación de “Hechizo del tiempo” (Groundhog day, Harold Ramis, 1993). Y aunque “Cita sangrienta” probablemente no será considerada dentro de las mejores comedias de horror de la década, es una película que muestra amor al género por parte de sus involucrados y que a pesar de algunas carencias en su realización, consigue hacer pasar un buen rato.
La película nos cuenta la historia de Jim (Danny Morgan), un hombre extremadamente tímido que está a un par de días de su cumpleaños número 30, al que además llegará siendo virgen. Esta situación resulta inaceptable para Alex (Michael Socha), su amigo parrandero y carismático que pasa las noches conquistando mujeres y que no puede aceptar que uno de sus mejores amigos no haya tenido todavía una relación sexual, por lo que le promete que antes de su cumpleaños él conseguirá que conozca y tenga una aventura con alguna mujer. Quiere el guion que Kitty y Lulu (Kelly Wenham y Georgia Groome), las chicas que conocen e invitan a salir a una noche de diversión, sean unas hermanas asesinas en serie que, cumpliendo un extraño ritual, han matado ya a varios hombres y para cerrar su ceremonia macabra precisan justamente de sangre de un hombre virgen.
El humor y el horror están correctamente equilibrados y a pesar de que el guion realiza variaciones constantes de la misma broma (la virginidad de Jim/la socarronería de Alex), las secuencias tienen buen tino cómico y consiguen que la película nos entregue momentos de suspenso y comedia con la creciente amenaza de las chicas sobre el francamente tonto par de fiesteros. En este sentido, el guion pinta en varias secuencias las conductas abiertamente estúpidas de muchos hombres al intentar lograr avances con una mujer y la funesta costumbre de obligar a una persona de carácter introvertido a comportarse como alguien que realmente no es.
También es cierto que “Cita sangrienta” no resiste un análisis formal más exhaustivo: la dirección de Benjamin Barfoot en ésta, su opera prima, tiene detalles accidentados que habrían funcionado mejor siendo realizados por alguien con más de destreza en el género, y la fotografía de Laura Bellingham tiene momentos en los que es difícil adivinar lo que está ocurriendo en pantalla. Pero sus detalles poco afortunados se ven equilibradas por logrados momentos de comedia gracias a la buena química de su cuarteto actoral.
“Cita sangrienta” es una opción más que busca que la gente regrese a las salas de cine tras la cuarentena, y puede verse en salas de nuestro país a partir del 27 de agosto del presente año.