Foto: Samantha Hellmann
 

Por Frida Jasso

“Holy Lands” (“Tierras Santas”) es la más reciente película de la novelista y cineasta francesa Amanda Sthers (París, 1978), que parece haber encontrado el camino para combinar la actividad literaria con la cinematográfica, pues tiene una incipiente filmografía y es autora de una decena de novelas traducidas a distintos idiomas, además de haber incursionado también en el teatro. “Holy Lands” (2018) es su tercer largometraje que sigue a su exitosa cinta “la Madame” (2017), que ella misma dirigió y escribió.

“Holy Lands” narra los encuentros y desencuentros de la cosmopolita familia Rosenmerck. Harry (James Caan) es un cardiólogo retirado y divorciado que se ha establecido en Israel donde ha instalado una granja donde cría puercos, para abastecer el pequeño mercado local. Su actividad le provoca la irritación de los religiosos ortodoxos, y eso le hace relacionarse con el rabino Moshe (Tom Hollander), con quien poco a poco traba amistad. Mientras tanto, en Nueva York, Monica (Rosanna Arquette), la ex esposa de Harry, es diagnosticada con una enfermedad terminal y se prepara para enfrentar su agonía. En esa misma ciudad, su hijo David (Jonathan Rhys Meyers) es un dramaturgo cuya homosexualidad lo hace blanco de los prejuicios aun existentes en su entorno laboral y social. Por último, su hermana Annabelle (Efrat Dor), es una fotógrafa trotamundos que se embaraza de un amante ocasional cuando visita a su padre en Israel y que disfruta con gozo el advenimiento de su bebé junto a su deshauciada madre.

La directora intenta mostrarnos la intimidad de estos cuatro personajes, no sólo a través de su conexión familiar sino también por sus particulares conflictos y dilemas. El cuadro es ensamblado para crear una atmósfera sensible y emotiva, una narración contenida a pesar de su carga melodramática y que apuesta por la idea de la reconciliación, lo que se consigue en ciertos tramos.

La directora busca equilibrar la trama con cuotas de humor, ternura y dolor. Para ello entrecruza la historia familiar con la representación teatral-dancística que monta en el escenario David (que ofrece buenos momentos visualmente), así como narración en off de los propios personajes que describen sus sentimientos y pesadumbres. El cuadro actoral, con los veteranos Caan y Arquette a la cabeza, es otro aspecto fuerte de esta producción

El resultado es desigual. Los cuatro personajes y sus itinerarios no conisguen la suficiente cohesión. A veces perjudica al filme cierta solemnidad, así como momentos forzados para generar tensión o dramatismo.  Aun así, es una película amable que puede digerirse fácilmente. Su estreno en Estados Unidos y algunas plataformas digitales está previsto para este 21 de junio.

Directora y guión: Amanda Sthers. Productores: Laurent Bacri, Didier Lupfer, Alain Pancrazi. Música: Grégoire Hetzel. Reparto: James Caan, Tom Hollander, Rosanna Arquette, Efrat Dor, Jonathan Rhys Meyers, Patrick Bruel.