Por Hugo Lara

Una de las primeras cosas que llaman la atención de “Licorice Pizza” (2021) es la textura y el color de su imagen que inequívocamente remite a los años setenta, logrado no solo mediante la ambientación y el vestuario, sino a través de la fotografía, la película de 35 mm con la que fue filmada y los lentes que se usaron. “Licorice Pizza”  es la más reciente película del aclamado cineasta Paul Thomas Anderson (“Magnolia”, 1999; “El hilo invisible”, 2017), quien también lleva crédito de guionista, productor y co-director de fotografía, junto con Michael Bauman.

Situada en 1973 en el Valle de San Fernando (Los Angeles, California), la trama sigue el romance intermitente entre el rechoncho adolescente Gary (Cooper Hoffman) y una chica judía y mayor que él, Alana (interpretada por la cantante Alana Haim). Es una relación de altas y bajas, de encuentros y desencuentros, en la que se insertan una colección de aventuras y anécdotas variadas, divertidas y curiosas.

Además de la atracción que siente Gary por Alana, otro motor de la narración son las diversas actividades de emprendimiento que lleva a cabo, como su actividad de niño-actor en un show musical o su iniciativa para comercializar camas de agua, o su participación en una campaña electoral o abrir un salón de maquinitas y videojuegos.  Cada uno de esos momentos conforman episodios donde entran y salen personajes extravagantes y singulares (basados en personalidades de la vida real, según ha dicho el propio director) que se engarzan brevemente con la vida de Gary y Alana. De hecho, el propio protagonista, Gary, está tomado de Gary Goetzman, un amigo del propio Anderson.

Así, desfilan en la trama la actriz Luccy Dolittle (Christine Ebersole) inspirada en Lucie Ball; el temerario actor Jack Holden (Sean Penn) que emula a William Holden; el violento estilista Jon Peters (Bradley Cooper), pareja sentimental de Barbra Streisand; o el político Joel Wachs (Benny Safdie). Por cierto, el capítulo donde figura Bradley Cooper es de lo mejor en términos comédicos, por sus peripecias y giros de tuerca. En lo que respecta al personaje de Alana, este sí creado por la ficción, tiene mucho mérito el trabajo de Alana Haim, que le da autenticidad y garra. Se nota la conexión y amistad entre ella y Anderson, quien suele dirigir varios de los videoclips de ella y sus hermanas, quienes por cierto aparecen en el filme junto a sus padres, como familia de ficción y realidad.

“Licorice Pizza” es un coming-of-age con gran frescura, que abreva de clásicos de las comedias románticas adolescentes como “American Graffiti”, 1973) de George Lucas o “Say Anything” (1989) y “Casi famosos” (2000), ambas de Cameron Crowe. Se degusta la logradísima reconstrucción de época, reforzada por una potente banda sonora donde se escucha a David Bowie, Susi Quatro y Chris Norman, The Doors, Paul McCartney, Nina Simone y otros. 

El filme hace una nostálgica reconstrucción de época en foprma de un mosaico, en la que se incoporan apuntes de distinta índole, particularmente de la cultura popular y del entorno que se vivía en Los Ángeles en aquella época, con viejas gloras del cine y el espectáculo; la crisis petrolera; lugares y restaurantes icónicos; la vida íntima de las familias judías; la esfera política y la agenda aun reprimida de la comunidad gay; entre otros apuntes.  

“Licorice Pizza” aparece con tres nominaciones en la próxima entrega del oscar (Mejor película, guion original y dirección). Al margen de sus posibilidades en esa premiación, es un filme con suficientes atributos para que cualquier cinéfilo la disfrute. Se puede ver en la Cineteca Nacional y otras salas.

Licorice pizza
(Licorice Pizza, Estados Unidos-Canadá, 2021, Dur.: 133 mins.)
 
Director: Paul Thomas Anderson Guión: Paul Thomas Anderson. Dir. Fotografía: Paul Thomas Anderson y Michael Bauman  Fotografía: Color  Música original: Jonny Greenwood. Edición: Andy Jurgensen. Con: Alana Haim (Alana), Cooper Hoffman (Gary), Sean Penn (Jack Holden), Tom Waits (Rex Blau), Bradley Cooper (Jon Peters), Benny Safdie (Joel Wachs), Milo Herschlag (Greg).  Productor: Paul Thomas Anderson, Sara Murphy y Adam Somner Productora: BRON Studios, Focus Features, Ghoulardi Film Company. Distribuidora: Universal Pictures. Clasificación: B.

Por Hugo Lara Chávez

Cineasta e investigador. Licenciado en comunicación por la Universidad Iberoamericana. Director-guionista del largometraje Cuando los hijos regresan (2017). Productor del largometraje Ojos que no ven (2022), entre otros. Director del portal Correcamara.com y autor de los libros “Pancho Villa en el cine” (2023) y “Zapata en el cine” (2019), ambos con Eduardo de la Vega Alfaro; “Dos amantes furtivos. Cine y teatro mexicanos” (coordinador) (2015), “Luces, cámara, acción: cinefotógrafos del cine mexicano 1931-201” (2011) con Elisa Lozano, “Ciudad de cine” (2010) y"Una ciudad inventada por el cine (2006), entre otros.