Por José de Jesús Chávez Martínez

Esta película es la secuela de Black Panther (2018), con la cual se da continuidad a todo ese exitoso cosmos de “Los Vengadores” de Marvel Comics. Es una vertiente de esta saga y mapa de super héroes que defienden supuestamente al planeta Tierra y al universo en sí, con atractivos despliegues de acción, violencia y efectos especiales, todo encuadrado dentro del cine fantástico. Estos modernos seres mitológicos por una parte hacen gala de gran fuerza física a la vez que de inteligencia y creatividad, y por otra también son víctimas de accidentes que los convierten en fenómenos con habilidades sobrehumanas.

En el caso de Wakanda, se trata de un país ficticio ubicado en África que posee el mayor desarrollo tecnológico y por lo tanto es la nación más poderosa del mundo. Tiene una élite de científicos que han perfeccionado un sistema de seguridad que lo protege de incursiones extranjeras y colonizadoras, haciendo ver a los Estados Unidos como una nación menor. Igualmente Wakanda tiene un sistema político monárquico encabezado por el Rey T’Chala o Pantera Negra (Chadwick Boseman) quien aparece en esta entrega a punto de morir a causa de una extraña enfermedad, luego de haber pertenecido a Los Vengadores (o Avengers) y jugar un papel diplomático importante en las Naciones Unidas. Sin embargo sucumbe. La hermana de T’Chala es Shuri (Letitia Wright), una joven científica que experimenta con una extraña hierba en forma de corazón para revivir a Pantera, pero desiste de ello a pesar de la insistencia de su madre la Reina Ramonda (Angela Bassett).

La base del desarrollo de Wakanda es un extraño elemento llamado “vibranio” (algo así como uranio, pero a la quinta potencia), de ahí que evite el riesgo de que otros países traten de explotarlo. Sin embargo, una expedición subacuática en el Océano Atlántico en busca del vibranio es llevada a cabo por la CIA y los Navy SEAL, pero es abortada violentamente por misteriosos seres marinos de piel azul encabezados por el poderoso Namor (Tenoch Huerta). La CIA sospecha que el ataque ha provenido de Wakanda, en tanto que Namor culpa a Ramonda y le exige le entregue al científico que ha creado la máquina exploradora de vibranio o de lo contrario destruirá al país africano usando a su numeroso ejército.

Lo curioso de esta cinta es la metamorfosis del personaje de Namor, cuyo origen es atlántico/estadounidense según el comic de Marvel, devenido en esta historia en una deidad de la mitología prehispánica mexicana: ni más ni menos que Kukulcán, el equivalente maya de Quetzalcóatl o la “Serpiente emplumada” del pueblo azteca, aunque conserva los rasgos originales de los pies alados y las orejas puntiagudas. Según el argumento en turno, una mujer maya ingiere una extraña planta que le impide respirar y la obliga, junto con otros pobladores que también la comieron, a sumergirse en el mar para sobrevivir y ahí dar a luz a Namor, un vigoroso tritón que además puede respirar fuera del agua, vuela velozmente y posee gran fuerza física. Con el tiempo se convertiría en el rey/dios de la nación maya subacuática de Talokán y la lleva a imponerse a los conquistadores españoles. Más adelante también aprovecharía el vibranio para diversos fines, especialmente para la defensa de su bello reino submarino.

La trama complicada nos conduce entonces al conflicto entre Wakanda y Talokán, teniendo de por medio a Riri Williams (Dominique Thorne), la joven y prodigiosa estudiante universitaria estadounidense, inventora de la máquina buscadora de vibranio, y que Namor quiere tener cautiva aun cuando Ramonda decide salvarla. Esta situación explota y la ira de Namor chocará con el surgimiento de una nueva Pantera Negra.

Para los amantes de la experiencia cinematográfica de Marvel, “Wakanda por siempre” será tal vez una obra mayor y siempre atractiva. Para otro tipo de espectadores puede ser un producto raro. No obstante, la intención del director Ryan Coogler ha sido dar visibilidad social a los afroamericanos desde “Black Panther”, estelarizada por el desaparecido Chadwick Boseman, con base en las raíces culturales y ancestrales del continente negro, pero en esta ocasión concede protagonismo a los latinos, en especial a los mexicanos que también se han insertado con cada vez mayor fuerza en la sociedad de los Estados Unidos. Coogler logra así reposicionar a estas minorías ya no tan menores.

El personaje de Namor destaca por sus raíces prehispánicas (presentadas con cierta ingenuidad, vale decir, aunque es cine fantástico, bien comercial pues), sus matices y sus motivaciones como monarca y hasta como estadista, pero esas características las resalta aún más la interpretación de Tenoch Huerta que logra transmitir emociones mayores que las que se han visto, en todos estos años, en el “Marvelismo” y  “Avengerismo” cinematográficos. “Wakanda por siempre” vale la pena en cierta medida por la presencia de este ya experimentado actor mexicano, conocido por los films “Días de gracia” (2011), “Güeros” (2014), “Vuelven” (2016) o la serie “Narcos: México” (2018-2020), que se adaptó bien a la construcción de su personaje y le dio ese plus que no todos logran, y menos en un típico producto de Hollywood. Además aprendió algunos diálogos en maya y tuvo que perfeccionar su técnica de natación. A ello le agregamos eficientes efectos visuales, la ambientación, otras buenas actuaciones (Martin Freeman o Jarrell Pyro Johnson, por ejemplo), varios gags simpáticos y el acento africano con el que hablan los “wakandianos”. Citando de nueva cuenta al maestro Tomás Pérez Turrent: se puede ver, sin problema.

Título original: Black Panther: Wakanda Forever. Año: 2022. Dirección: Ryan Coogler. Producción: Kevin Feige, Nate Moore. Guion: Ryan Coogler, Joe Robert Cole, basado en “Pantera Negra” de Stan Lee y Jack Kirby. Música: Ludwig Göransson. Fotografía: Autumn Durald Arkapaw. Montaje: Michael P. Shawver, Kelley Dixon, Jennifer Lame. Productora: Marvel Studios. Distribución: Walt Disney Studios Motion Pictures. Intérpretes: Letitia Wright, Lupita Nyong’o, Danai Gurira, Tenoch Huerta, Winston Duke, Dominique Thorne, Florence Kasumba, Michaela Coel, Jarrell Pyro Johnson, Martin Freeman, Angela Bassett, Julia Louis-Dreyfus, Mabel Cadena.

Por José de Jesús Chávez Martínez

Comunicólogo egresado de la UAM Xochimilco. Profesor investigador en la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Autónoma de Occidente Unidad Culiacán, con las líneas comunicación y educación, y el cine como dispositivo didáctico, de las cuales se han desprendido diversos artículos científicos y tres libros. Es miembro del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII). Desde 2021 es colaborador de correcamara.com