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Por Elena Padrón
El productor Agustín Almodóvar, hermano del más conocido en el mundo de los directores españoles, Pedro Almodóvar, y cofundador con él de “El Deseo” en 1985, estrena esta semana en España una película que no ha dirigido el autor de “Mujeres al borde de un ataque de nervios”, sino el argentino Damián Szifrón, la celebrada “Relatos salvajes”, pero que coprodujeron y de la que están más que orgullosos. “La felicidad” (esta tragicomedia negra está siendo un éxito internacional) no empaña su visión negativa de la realidad del cine en España: “Va a ser un año histórico en cuota de pantalla en términos absolutos, en venta de entradas, porque venimos toda la década perdiendo espectadores. Va a haber una subida de la cuota de mercado del cine español, pero tendremos que tener mucho cuidado en no hacer un análisis triunfalista porque la situación es probablemente la peor de los 30 años que llevamos de profesión”.
“Tinín” Almodóvar agregó, en declaraciones al diario económico Expansión: “En esta situación, en España hay dos cadenas de televisión, Antena 3 y Telecinco, que tienen por ley obligación de producir y que hacen un tipo de cine que lleva asociada una promoción muy potente. Ellos usan sus propios canales en la autopromoción y la gente que producimos con nuestros propios medios, no podemos competir. Eso hace que vivamos una especie de feudalismo. Si quieres que tu película llegue muy lejos, tendrás que ir a Antena 3 o Telecinco, que además te impondrán unas condiciones editoriales muy concretas. Y el cine es mucho más que eso. El cine es la asunción de un enorme riesgo. Sería muy limitante que el modelo de cine fuera del de esas dos empresas, que hoy tienen un éxito que ahí está”.
El productor también expresó que él cree que esto debería de cambiar para que otro tipo de cine tenga también cabida en España: “El día que la propia producción reconsidere el punto al que hemos llegado precisamente por obligar a que las cadenas tengan que entrar en producción, ese día la situación vendrá a un panorama más parecido al de los países de nuestro entorno, donde hay películas muy populares y una clase media de producción. No podemos vivir sólo de grandes éxitos de taquilla”.
El más joven de los hermanos Almodóvar comentó cómo con “El Deseo” han optado por hacer caso de su instinto, sin atender a lo que pueda parecer que le va a gustar al público: “Hemos aprendido que no hay fórmulas, nunca vamos a saber qué es lo que va a funcionar y lo que no, pero tenemos que ser muy fieles a nuestra percepción y criterio. Hay que ser coherentes y no hacer nada porque parezca que el mercado demanda algo porque luego al final te equivocas”. Y es que la productora nació de la necesidad de su hermano (el internacional Pedro Almodóvar) por hacer el cine que le gustaba, ese tan propio en su estilo que ha caracterizado siempre al manchego y que hubiera sido muy complicada de llevar a cabo con la fórmula tradicional de producir en España hasta el momento. “El Deseo” sigue apostando por el cine en el que cree, al menos por el cine que les gusta a estos dos hermanos que siempre han compartido su amor por el cine.
Este viernes, tras sumar más de tres millones de espectadores en la Argentina y ser aplaudida en Cannes, Toronto y San Sebastián, “Relatos salvajes”, en cuya promoción Pedro y Agustín han participado activamente, llega a los cines ibéricos con excelentes expectativas.