Por Samuel Lagunas

Desde Guanajuato

La jornada del viernes del Festival Internacional de Cine de Guanajuato estuvo marcada por la celebración-homenaje que se hizo a la carrera del actor mexicano Damián Alcázar, quien en el emotivo discurso que pronunció en el Teatro Juárez se mostró profundamente agradecido tanto con el Festival como con la Filmoteca de la UNAM, que le entregó un reconocimiento especial. Alcázar aprovechó para asumirse como “actor latinoamericano” y enfatizó que la esperanza ciudadana está fortalecida después del anterior proceso electoral del 1 de julio donde, afirmó, “en México triunfó la democracia”. La cinta elegida por el GIFF para reconocer la trayectoria de Alcázar fue la colombiana “Satanás” (Andrés Baiz, 2007), en la que encarna a Eliseo, un veterano de la guerra de Vietnam que un día explota y asesina a más de 20 personas en un restaurante. Basada en un hecho histórico y en la novela homónima de Mario Mendoza, la película intenta ser una indagación profunda sobre los motivos de la maldad en el ser humano y consigue plantar en la audiencia una angustia, ante la imposibilidad de explicar lógica o racionalmente sucesos como la matanza de Pozzetto, y nos tienta a formarnos respuestas desde el lenguaje mítico y religioso.

“The tale” (Jennifer Fox, 2018)

Sin embargo, la cinta que acaparó la atención del público fue “The tale” que tuvo su estreno latinoamericano tras su paso por festivales en Estados Unidos. “The tale” es una película amarga, honesta y cortante, de ahí la polémica y el debate que ya ha empezado a provocar. Al estar basada en un cuento que la misma Jennifer escribió cuando tenía 13 años, la película se convierte en una ficción sobre otra ficción. Jennifer (Laura Dern) es una profesora universitaria y documentalista que un día recibe una llamada de su madre quien, angustiada, le exige una explicación sobre un cuento suyo que encontró donde relata una situación de abuso sexual durante el verano en que acudió a clases de equitación cuando tenía 13 años. Una vez que Jennifer recibe el cuento en su domicilio, se desatan en ella olas de recuerdos y la imagen que ella se había formado de sí misma comienza a desmoronarse. La película le sirve a Kent no sólo como tratamiento, sino que trasciende el autoconsuelo y azota sobre el espectador una dolorosa pero siempre urgente reflexión sobre temas como el consentimiento y la revictimización. Formalmente, “The tale” se aventura un poco en el empalme de narrativas (la del relato de Jennifer a los 13 años y los recuerdos de Jennifer a los 40 sobre esos mismos hechos) y en los modos de representación del hecho mismo del abuso; aunque da prioridad en todo momento a que la transmisión del mensaje sea eficaz. No obstante, es gracias a los juegos de espejos que se generan entre la ficción, la realidad, y la interpretación de ambas, que la cinta establece su propio punto de equilibrio, punto que en sí mismo es polémico: ¿para qué hacemos cine o escribimos?, ¿para salvarnos o para engañarnos? En esta ambigüedad es que “The tale” se posiciona y sostiene su discurso.

“Los versos del olvido” (Alireza Khatami, 2017)

Dirigida por el iraní Alireza Khatami, “Los versos del olvido”, situada en el Cono Sur, presenta la historia de un trabajador de 70 años (Juan Margallo) de la morgue municipal, en donde un día irrumpe un grupo armado buscando un sitio donde ocultar varios cuerpos. En esa peripecia, el empleado se da cuenta de que olvidaron el cuerpo de una muchacha anónima, a la que buscará darle una sepultura honrosa. La película tiene como trasfondo y como pivote del simbolismo y la fantasía que se abren paso en la vida del protagonista el encallamiento de numerosas ballenas en la playa y cómo algunas se unen para rescatar a otras y juntas poder regresar al mar. Esta “lección” de la vida animal le sirve a Khatami para definir la moral de su cinta y generar un discurso no muy diferente al de películas como “El hijo de Saúl” (László Nemes, 2015) o “Mimosas” (Oliver Laxe, 2016) donde el punto de imantación no es otro que la dignidad de todos esos hombres y mujeres anónimos que día a día desaparecen y cuyos cuerpos quedan olvidados. Si hay un compromiso social que también hay que asumir, y una solidaridad que cada vez olvidamos más, es con ellos.

“Obscuro barroco” (Evangelia Kranioti, 2018)

Este documental de apenas 60 minutos sobre la activista transgénero brasileña Luana Muniz ofrece una perspectiva poco frecuente sobre Río de Janeiro y su carnaval. Amparado en fragmentos del libro “Agua viva” de Clarice Lispector leídos por Luana y en delirantes secuencias de baile, “Obscuro barroco” crea una conjunción exacta desde donde poder repensar los límites y las posibilidades del cuerpo —nuestra brújula más inmediata— y, ¿por qué no?, del corazón.

 

Foto: PRENSA GIFF

Dirección: Jennifer Fox; Título original: The Tale; Año: 2018; Duración: 114 min;Reparto: Laura Dern, Isabelle Nelisse, Jason Ritter, Elizabeth Debicki, Ellen Burstyn, Common, Jaqueline Fleming, Matthew Rauch, Rebecca Chulew, Thom Bishops, Scott Takeda, Gretchen Koerner, Isabelle Amara, Grant James, Juli Erickson, Rebecca Gamble, Frances Conroy, John Heard, Laura Allen