Por Ali López
Desde Puebla
Isaac Ezban regresa a Mórbido, festival que lo vio nacer y crecer como cineasta, a presentar su segundo largometraje: “Los parecidos” (México-2015). El filme es otra vez un intento de ciencia-ficción, mucho más cercano a la Fantasía que al riguroso género donde maestros del cine y la literatura como Kubrick y Asimov participaron.
La historia parte de una trama sencilla, que poco a poco se va complejizando. Suspenso sostenido por un misterio paranormal, y en el cuál los implicados se ven afectados, no sólo de manera indirecta, sino en su persona misma. La madrugada antes a la matanza del 2 de octubre en Tlatelolco, un grupo de desconocidos se ven atrapados en una lejana estación de autobuses; todos pretenden ir a la Ciudad de México, pero la intensa y anormal lluvia que cae afuera no los deja. En todos los personajes vemos referenciada la situación social que se vivía en aquel momento. Pero eso no es lo que importa. Lo que sucede es que todos comienzan a parecerse a uno de ellos. Su cara se repite tanto en las personas que lo rodean como en las imágenes publicitarias del lugar, y las revistas que por ahí circulan; la sospecha cae sobre este rostro alfa ¿Pero será él el culpable de lo que sucede?
Al igual que su primer largometraje “El incidente” (México-2013) en “Los parecidos” Ezban dota de un tono a la trama similar a “La dimensión desconocida”. La diferencia es que de aquella serie ya han pasado algunos años, y a pesar de eso, funciona de mejor manera. La puesta en escena del director mexicano es pobre, la presentación de los personajes parece un teleteatro mexicano de los años 80, un poco improvisado y muy poco actuado. Pero se notan los ensayos, se nota que los movimientos han sido trazados y ejecutados una y otra vez, el problema es ese, luce acartonado. Otra vez comparando el primer filme con el segundo, vemos una ligera mejoría en el tono actoral, un poco más estable, pero que se sigue perdiendo por largos ratos.
La historia se desenvuelve con un ritmo agradable, sin embargo, el guion cojea en su comedia, la cual, no se entiende plenamente si sea, o no, voluntaria. Las risas están presentes, y hay momentos en los que parece que era intención de la cinta provocarlas, pero de repente, escenas que tendrían que ser de tensión franca, se vuelven sketches dignos de un programa de comedia de Televisa. Y la culpa la tiene la estética, la imagen y selección de los personajes, bastante estereotipados, tanto, que regresamos a lo dicho del teleteatro.
La estética termina por ser pobre, y a pesar de que el ritmo y el misterio luchen por mantenerse, ese imaginario que debería provocar escozor y termina por provocar risa; tiran la película. Porque aunque se intente justificar que lo ridículo es parte intrínseca de “Los parecidos”, la cinta nunca se presentó como tal. Revisemos otra vez el trabajo de Ezban, y su bien lograda sección de “México Bárbaro” (México-2014) “La cosa más preciada” donde la comedia es, y habita, desde el primer cuadro dela cinta. El director conoce el tono y sabe cómo explotarlo, en su segundo largometraje hay un exceso de carcajadas, que, repito, no deberían estar en ese momento y ese tiempo.
Ambos films de Ezban han ganado importantes premios internacionales especializados en el género fantástico, y esto nos hace a mucho preguntarnos cómo es que esto sucede. Lo que la mayoría dirán, tal vez, es que aquí somos malinchistas y por eso no nos gusta su trabajo; otros dirán que son galardones merecidos y lo que sucede es que México no está preparado para recibir esto. Lo que yo imagino, y propongo, es que en el extranjero ambas cintas de ciencia ficción mexicana, causan el mismo asombro que lo que nos sucede con una cinta de terror africana; es por su peculiaridad que sobre sale, no por su calidad.
“Los parecidos” es una cinta fallida, que queda mucho a deber y que parece ser un tropiezo; esa carrera no va en ascenso. La película falla en mucho aspectos, y asombra por su peculiaridad, pero en el trasfondo termina por ser muy poco, casi nada. Sus créditos de apertura homenajean a las cintas viejas, en blanco y negro, de los años 50, es más, recuerdan al mítico Ed Wood jr. Y así, el resto de la cinta, jamás sale de ese todo lastimero de bajo presupuesto, conformismo y personajes rídiculos.
Los parecidos
Director: Isacc Ezban, Productor / Producer: Isacc Ezban Elsa Reyes, Miriam Mercado. Guión / Screenplay: Isacc Ezban. Productora / Production Company: Red Elephant, Yellow Films, Zensky Cine. Fotografía / Cinematography: Isi Sarfati. Música / Music: Edy Lan. Editor: Óscar Figueroa. Efectos Visuales/ Visual Effects: Sergio Jara. Efectos de Maquillaje / Makeup Effects: Marco Antonio Hernández, Cristian Perez Jauregui. Reparto / Cast: Gustavo Sánchez Parra, Luis Alberti, Humberto Busto, Cassandra Ciangherotti, Fernando Becerril, Alberto Estrella, Carmen Beato, Pablo Guisa Koestinger, Santiago Torres, Catalina Salas, María Elena Olivares. México 2015 89 min Color Clasificación B : Adolescentes y Adultos