“Lo más increíble del mundo es volver pero para hacerlo tienes que irte”: son las palabras de una azafata de la Ciudad de México que aparecen en “Mal de tierra”, el documental de Alejandra Márquez que sigue a gente, que por razones laborales, viaja constantemente y vive muy poco en su hogar.
“Yo viví fuera de México y estaba muy obsesionada con esta idea del no pertenecer, de que de tanto estar viajando terminas por desprenderte de ti mismo y sin saber quién eres”, comentó la directora a CorreCamara.com sobre su interés en explorar en la vida de gente que vive en estas circunstancias.
De esta manera, juntó a tres grupos de personas: una familia de traileros de Ixtapaluca, Estado de México; unos aeromozos del Distrito Federal y a unos pescadores del puerto de Veracruz para mostrar, desde su punto de vista, la parte sensorial y emocional del viaje y el regreso: “es un poco la idea de La Odisea de Ulises, tratando de regresar a casa y de recuperar algo que no se puede”.
Márquez mencionó que otra de las cosas que le interesó tratar en “Mal de tierra” fue “el tipo de carácter o forma de ser que se requiere para llevar esta forma de vida en donde los ciclos son muy diferentes, como el de la serpiente que se muerde la cola; éstas personas tienen un concepto de la adrenalina muy característico, para ellos es una especie de pulsión de vida salir, aventarse al mundo y ver lo que pasa”.
La directora comentó que el documental no tiene un protagonista absoluto pues, acorde con la idea del “desprendimiento total” que estos seres experimentan, “era coherente ver cómo se van “deshaciendo”; no hay un guía en la historia porque no hay un apego de su parte, ellos salen y entran cada tanto en la película”.
Alejandra Márquez mencionó que una de las dificultades a las que se enfrentó a la hora de realizar su filme fue localizar a los personajes que aparecen en él: “es gente que nunca está, nosotros los buscábamos en un ambiente tan antinatural para ellos como es su casa”.
Y añadió que durante el rodaje que se prolongó por año y medio a partir de 2008, “todo el tiempo estuvimos mareados: al subirnos a los aviones, a los trailers, a las embarcaciones, y ése es uno de los porqués del título: mal de tierra significa mareo y era lo que los marineros nos decían que experimentaban estando en tierra firme pues están más acostumbrados a estar en constante movimiento. Nosotros vivimos lo que sienten ellos a través de su mareo”.
“Mar de tierra” se presenta en el marco de Distrital el 1º de junio en la Cineteca Nacional, el 2 de junio en Lumiere Reforma y el 3 del mismo mes en Cinemex WTC.
Para ver el trailer visita http://distrital.mx/2011/mal-de-tierra-land-sick/