Otorgan a Michael Haneke el Premio Príncipe de Asturias
Noticine.com-CorreCamara.com
El cineasta germano-austríaco Michael Haneke ha obtenido este jueves el Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2013, el galardón socio-cultural más importante del reino de España, dotado con 50 000 euros. El jurado, presidido por José Lladó, aceptó la propuesta de la embajada de Austria, y otorgó la recompensa al autor de “Funny games”, “Caché” y “Amor”, justificándolo “por su creación cinematográfica de profundas raíces europeas, que constituye una original y personalísima aproximación de radical sinceridad, aguda observación y extrema sutileza a problemas fundamentales que nos conciernen o afectan individual y colectivamente”.
Según los integrantes de este jurado español, “Haneke ilumina y disecciona con deslumbrante maestría aspectos sombríos de la existencia como la violencia, la opresión y la enfermedad, que afronta con extraordinaria sobriedad formal a la vez que abre espacios a la persistencia consoladora del amor, la confianza y el compromiso. Con una filmografía en continua evolución, que destaca también por la prodigiosa virtud de Haneke en la elección de sus intérpretes, este creador europeo es una referencia capital de la cinematografía de nuestro tiempo”.
Michael Haneke (Munich, 1942) es uno de los directores más admirados y premiados del cine contemporáneo. Ganador del Oscar a mejor film extranjero por “Amor” este mismo año, el cineasta afincado en Francia ya había logrado la Palma de Oro del Festival de Cannes por esta misma cinta en 2012 y antes por “La cinta blanca”. Ha recibido innumerables otros galardones, entre los que se encuentran el Premio al Mejor Director por “Caché / Oculto” (2005) y el Gran Premio del Jurado por “La pianista” (2001), ambos en el Festival de Cannes.
El guionista y realizador alemán criado en Austria empezó como realizador televisivo a mediados de los años 70 y debutó en el cine a finales de la década siguiente, con “El Séptimo Continente”. Su fama se extendió a partir de “Funny games” (1997), cinta que él mismo adaptó luego para el cine estadounidense.
“Mi principio -decía en una entrevista hace tres años- siempre ha sido hacer preguntas, presentar situaciones muy precisas y contar una historia para que el espectador pueda buscar las respuestas por sí solo. En mi opinión, lo contrario es contraproducente. Los espectadores no son compañeros de trabajo del director. Me esfuerzo mucho para obtener este resultado. Me parece que el arte debe hacer preguntas y no avanzar respuestas que siempre me parecen sospechosas, incluso peligrosas”.
Sobre el suceso de su último trabajo, “Amor”, manifestaba el año pasado: “Siempre ocurre después de un éxito, pero también pasa en cualquier otro momento. Al principio hay que demostrar quiénes somos; luego, confirmarlo, y finalmente, no decepcionar nunca. Un realizador siempre tiene ganas de dar lo mejor de sí mismo. En otras palabras, el estrés nunca disminuye después de la primera película”.
El de Haneke ha sido el primero de los ocho Premios Príncipe de Asturias que se conceden este año, en que cumplen su trigésimo tercera edición. El acto de entrega tendrá lugar en fechas por determinar del próximo otoño en Oviedo, en un solemne acto presidido por el Príncipe de Asturias, heredero de la corona española.