Por Alfonso Zárate

Michael Hauge es uno de los cuatro
especialistas que participarán en la Cumbre de Guionistas en la Ciudad
de México, el próximo viernes 27 y sábado 28 de enero próximos, donde
también intervendrán Syd Field, John Truby y Linda Seger, cuatro “gurús”
de la especialidad”. CorreCamara.com charló con Hauge a propósito de
este evento, así como de su experiencia como consultor en un área
fundamental de la cinematografía: el guión.

Hauge es consultor de relato, autor y orador quien trabaja junto con los
escritores y cineastas en sus guiones, novelas, películas y proyectos
televisivos. De acuerdo a su curriculum, ja preparado a escritores o
asesorado proyectos para Will Smith, Julia Roberts, Jennifer Lopez,
Kirsten Dunst, Robert Downey, Jr. y Morgan Freeman, además de cada 
estudio importante en Hollywood.

El libro de Hauge, “Cómo Escribir Guiones que Venden”, está ahora en su
edición 32 y es un libro de referencia para las industrias del cine y la
televisión, como también otro de sus libros, “Los dos Viajes del
Héroe”, y “Cómo Vender tu Relato en 60 Segundos: La forma Garantizada
para que tu Guión Sea Leído”, de reciente aparición.

CC: ¿Qué cambios observa en la escritura de guión actualmente? ¿Hay algunas tendencias predominante?

MH: No demasiado, ciertamente es más y más importante encontrar guiones con  potencial comercial, pero creo que ahora hay más oportunidades en la televisión de las que había antes  de que entraran con fuerza las compañías de cable y eso ha permitido ampliar un poco la calidad y el estilo de los guiones. En términos del oficio de contar historias es posible que el ritmo se haya incrementado, si ves películas antiguas que se notan lentas, las actuales saltan a las acciones con más velocidad muy a menudo, pues el público se ha vuelto más familiarizada con los recursos narrativos, la yuxtaposición del tiempo, y cosas que la gente ha aprendido con los videojuegos y otros medios. Por otro lado, creo que los principios de la narrativa en realidad no han cambiado en siglos, en aspectos como la definición de personaje, el deseo y su transformación.

CC: ¿Qué hace diferente su modelo de enseñanza sobre guión con respecto a otros gurús de la escritura de guiones y la narrativa?

MH: Creo que en primer lugar ésta es mi propia aproximación, a partir de mi punto de vista, el trabajo que me da dejado decenas de guiones y el desarrollo que me ha permitido ver cientos de películas, pues he trabajado 35 años en la industria. Es una combinación de ver películas y de trabajar con escritores y productores y leer miles de guiones, algunos buenos y otros no. En términos de mi propia aproximación, creo que lo que se podrá apreciar en la Cumbre de Guionista es que yo me enfoco primordialmente en el personaje y su transformación y cómo interactúa con la estructura de la historia y la trama. Es lo que yo suelo llamar “Hero’s Two Journeys”

CC: ¿La experiencia de este seminario es diferente a leer sus libros? ¿Es mejor? ¿Es necesario leerlos?

MH: No es necesario leerlos y de hechos mucho de lo que yo abordo en el seminario no está en los libros, es algo nuevo que he desarrollado en paralelo a los libros pues en alguno por ejemplo trato sobre el “pitching” y cómo lograr que sean leídos.  

CC: ¿Crees que cualquiera pueda escribir un guión?

MH: Sí, pero la pregunta no sería si puedo escribirlo o si tengo talento. Hay que asumir que uno tiene talento y entonces preguntarse si uno tiene pasión. Es decir ¿disfrutas el proceso de escribir? Porque las coas no funcionan si entras a este oficio pensando en ganar mucho dinero o poner tu nombre en una película, lo importante es si prefieres las palabras y escribirlas sobre un papel, en lugar de dirigir o ser director de fotografía. Si ese es el caso, si tienes una pasión, entonces debes aprender el oficio, pues no basta con ir al cine y pensar que uno puede hacer porque tenemos talento. Puede ser que llegues a ser un buen narrador, pero hay muchas reglas, información, códigos, guías, restricciones en la narrativa cinematográfica. Y eso es lo que queremos brindarles en la Cumbre.

CC: ¿Crees que existe un riesgo de perder creatividad leyendo todos estos libros sobre el oficio del guionista? ¿No se corre el riesgo de volverse muy formulario?

MH: Desearía que algunos guiones fueran más esquemáticos, porque no creo que ese sea el problema, sino que el problema de los guiones que he leído y que resultan muy aburridos es debido a que el escritor no entendió como contar una historia en términos cinematográficos. Hay muchas maneras que a lo largo de las décadas, por más de cien años, han probado ser muy efectivas para involucrar emocionalmente al público con su trama. Esas son las fórmula a las que yo me refiero, sé que a mis otros tres compañeros no les gusta la palabra fórmula, pero para mí una fórmula  es una manera consistente de hacer las cosas, la originalidad proviene de aplicar esa formula de manera única a la historia que uno desea contar. El problema no es la fórmula sino cómo usarla. 

CC: ¿Crees que el guionista debe preocuparse de los aspectos comerciales de su historia?

MH: Aboslutamente. Creo que es una de las cosas más importantes que el guionista debe pensar. Porque si tu eres un escritor, un narrador, entonces es que tienes interés en que tu historia sea escuchada, quieres que la gente vea tu película, La gente no va a ver películas sólo porque tú pienses que es interesante, sino que van porque esperan obtener experiencias emocionales, así que si no sabes como atraer a la audiencia a una sala de cine, entonces nadie va a conocer tu historia. Y si tú no escribes una historia que parezca que puede gustarle al público, entonces los estudios no querrán financiarte porque les interesa recuperar su inversión. Pienso que la simple pregunta que debe hacerse cualquier guionista es si miles de personas ¿estarán dispuestos a pagar por ver esta historia?

CC: ¿Consideras aceptable que los cineastas escriban sus historias pensando en que no serán películas comerciales sino para festivales o películas de arte? Es algo que pasa mucho en México

MH: Eso no sólo pasa en México sino también en estados Unidos: “Voy a hacer una película artística”. El problema con eso es saber quién va a  pagar por una película “artística”. y cuál será el presupuesto para hacerlo. Si haces una película que se sitúa en tu departamento , y si tienes una tarjeta de crédito con un buen saldo para financiarla tú sólo, puedes hacer lo que quieras. Pero desde mi punto de vista, aquellas personas que quieren hacer películas de un presupuesto mayor que lo que ellos pueden invertir de su bolsillo. van a necesitar del apoyo del gobierno, los estudios, las televisoras y otras compañías y para algunos de ellos no es suficiente hacer una película únicamente para festivales. Puede ser que ahí logres que la gente la vea y alguien se interese en distribuirla y entonces podrás hacer dinero.

CC: ¿Consideras que hay guiones que deben ser abandonados o todos pueden arreglarse?

MH: Definitivamente hay guiones que deben ser abandonados, como algunas pinturas, esculturas o canciones que tendrían que ser abandonadas. Un buen escritor sabe que debe probar muchas cosas y también a veces darse cuenta que debe desistir.

CC: ¿Cuándo sabes que un guión está terminado?

MH: Cuando alguien te lo compra. Recuerdo una entrevista con Robert Tawn, el guionista de “Chinatown”, uno de los mejores guiones jamás escrito, quien comentaba respecto al resultado final de la película que “podría haberlo mejor con otro tratamiento más”. No estaba satisfecho del todo. Es difícil que un guionista quede satisfecho al cien por ciento pero es parte del proceso, determinado por los factores de la producción.

CC: ¿Piensas que estos esquemas funciones para otras cinematografías fuera de Estados Unidos?

MH: He tenido otras experiencias en México, he trabajado con guionistas mexicanos antes, lo mismo que de Suecia, España, Canada, Escocia, Australia, Israel y he identificada que en cualquer cinematografía hay principios que aplican para todos. Cierto que hay variantes en otras experiencia y entornos, como en la India, en Bollywood. Pero si miras a las películas más taquilleras de México de los últimos diez años y si te fijas cuántas son películas de Hollywood…

CC: ¡Todas!

MH: (Risas) Ok, entonces los principios de los que hablamos funcionan obviamente para el público mexicano, eso quiere decir que si los cineastas y guionistas mexicanos se sirvieran de esos principios podrían atraer al público mexicano e incluso a un público internacional.

CC: ¿Crees que deberíamos escribir de acuerdo a nuestros presupuestos? No tenemos los presupuestos millonarios de Hollywood

MH: La respuesta corta sería sí, porque necesitas escribir en función de las posibilidades de la industria a la que perteneces. Ahora, si tienes un guión que requiere de gran presupuesto, no quiere decir que por el hecho de ser mexicano no puedas llevarlo a Hollywood. Si tienes un guión como “Transformers” o “Independence Day” o de esas películas de acción y efectos especiales, tal vez deberías traducirlo al inglés y  promoverlo en Hollywood. Ahora, esta es mi conclusión: entre el presupuesto y la historia, la historia es más importante. Es mejor tener una buena historia que es cara, que una historia floja pero que es barata.

Porque actualmente en el cine es posible ya hacer muchas cosas y encontrar formas de economizar, no todas. Por ejemplo, si piensas en una película como “Bridesmaids” o  “The Help” no hay motivo para que no se pueda hacer en México, y fue un gran éxito. así como The Help, pero hacer Harry Potter sería más difícil, aunque podría hacerse más barata, quitando algunos de los demonios

CC: O quitando la magia…

Escucha la entrevista completa:

Entrevista con Michael Hauger – Mexico 1 de 3

Entrevista con Michael Hauger – Mexico 2 de 3

Entrevista con Michael Hauger – Mexico 3 de 3

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