Por Leticia Carrillo
Después de haber sufrido varios retrasos en su fecha de estreno, el drama policíaco ‘Bala mordida’, protagonizada por Damián Alcazar (‘Chicogrande’) y Miguel Rodarte (‘Amar a morir’), finalmente podrá ser visto por el público de la Ciudad de México dentro de la siguiente edición de Distrital Semana de Cine Mexicano y Otros Mundos que se llevará a cabo del 27 de mayo al 6 de junio.
En entrevista con CorreCamara.com el director del filme contó sobre los intérpretes que encabezan el reparto de su ópera prima: “Damián es uno de los actores vivos más grandes del planeta, es un gran compañero de actores, comparte mucho sus escenas, y tiene una presencia magnética entre el público, como lo pudimos comprobar en el festival Hola México de Estados Unidos, donde presentamos la película…”.
“Miguel Rodarte se clavó mucho en su personaje, tres meses antes se iba los fines de semana con los policías a patrullar, también fuimos a prácticas de tiro. Yo le dije que su apariencia tenía que ser la de una persona que se ve sucio pero no desaliñado, mostrando esa suciedad de cuando estas todo el día sudando, ¡y él no se bañó en 52 días de rodaje!, era bastante difícil estar cerca de él (risas), pero esto habla de su compromiso actoral. Fue muy divertido trabajar con gente como ellos o como Gustavo Sánchez Parra (‘Rabia’), Gina Morett, (‘Carnaval de Sodoma’) que es increíble; Mariana Gajá (‘Capadocia’), Dagoberto Gama (‘Familia tortuga’), Flor Payán (‘Arráncame la vida’) y Roberto Sosa (‘Tlatelolco’)”, añadió Muñoz.
El cineasta egresado del Centro de Capacitación Cinematográfica contó que estuvo ensayando durante dos meses con el elenco pues “como ocupamos patrullas y uniforme clonados”, las secuencias de la calle se tenían que hacer en el menor tiempo posible, por lo que también fue necesaria la utilización de hasta tres cámaras que captaban la acción desde distintos ángulos.
En ‘Bala mordida’, Mauro Hernández, un joven policía preventivo, se ve envuelto en un transacción de drogas y por quedarse con un dinero extra canjea su pistola por mercancía. Discute con Joaquín, un traficante y expolicía, a quien amenaza; después la banda de Joaquín le roba la droga y lo hiere. Este evento se convierte en un escándalo mediático en el que la deficiencias de los chalecos antibalas que portan los agentes del orden escala hasta tocar el tema de la malversación de fondos policíacos.
Diego Muñoz dijo que el guión de la película lo escribió desde hace casi diez años “y está basado en reportes policiales reales”, pero fue muy difícil levantar el financiamiento del proyecto porque en ese entonces, los inversionistas decían que en México no pasaban las cosas que el texto describía o que la gente no estaba acostumbrada a esos niveles de violencia, “pero hoy, tristemente, la realidad nos rebasó por mucho”, aseguró el realizador.
Asimismo, el director consideró que su propuesta narrativa original “era mucho más intensa en términos del sufrimiento casi dostoievskiano del protagonista, pero gracias a Dios, el editor Felipe Gómez quitó muchas de esta cuestiones”.
De esta forma, de acuerdo al realizador, ‘Bala mordida’, más que una crítica a los órganos de impartición de justicia mexicanos, es un retrato “de lo que viven los policías y cómo la gente, sobre todo los chilangos, los trata. Los policías no tienen toda la culpa, ellos son representantes de la mal llevada justicia en este país, que en realidad no existe porque cuesta dinero; ellos están muy limitados en sus facultades judiciales porque a veces sólo son testigos pasivos de los hechos, pero también tienen mucha libertad para extorsionar”.
Muñoz mencionó que su deseo es que la cinta sirva para que “el público replantee su actitud hacia los policías y ellos a su vez, respeten y hagan respetar a la organización que representan”.
Asimismo, el autor del premiado cortometraje ‘Rastros’ consideró que el país está siendo testigo de la distancia existente entre lo que transmiten los grandes medios de comunicación y lo que realmente está pasando en las calles mexicanas: “ese es el gran problema de la corrupción, la falta de confianza, somos una sociedad poco participativa porque como ciudadano no sabes en quien confiar”.
Diego Muñoz expresó que a pesar de que su película es “muy chilanga”, eso no ha impedido que espectadores de otros países, como los que se dieron cita en el Festival Internacional de Cine de Varsovia, se identificaran con los personajes de la historia plasmada en ‘Bala mordida’: “la gente de allá se interesó mucho por el Distrito Federal aunque las partes de la ciudad que se ven son llenas de pintas y golpeadas; a ellos se les hizo muy atractivo ver a una sociedad tan dispar en la que las clases sociales están muy separadas”.
Finalmente, el director informó que el filme tendrás tres funciones en Distrital y también cerrará el próximo 6 de junio el Hola México Film Festival, en Nueva York.
EN LA IMAGEN: Fotograma de la película