Por Hugo Lara
Cuenta el anecdotario hollywoodense que Tom Hanks, la noche que ganó el Oscar por su interpretación en “Philadelphia”, dedicó uno de sus agradecimientos a su ex profesor de arte dramático en Oakland y se refirió a él como uno de los “finos gays americanos” que retribuyen a la sociedad. Ciertamente, era un reconocimiento público enorme para un profesor de secundaria, un saludo que se había visto en todo el planeta y por supuesto en Oakland. El problema es que el profesor practicaba su homosexualidad puertas adentro, es decir, que no le interesaba divulgarlo y menos aún en una transmisión televisiva a nivel mundial. Parece ser que a raíz de la imprudencia de Hanks, se desató un pequeño escándalo en los círculos que frecuentaba el profesor.
Esta anécdota fue retomada por Paul Rudnick, el guionista de “Es o no es” (IN&OUT) (guionista de “La familia Adams 2. Valores Familiares”), quien a partir de ella construye, con algunas variantes, una comedia gay ligera y divertida. Howard (Kevin Kline) es un refinado profesor de literatura de la secundaria de un pequeño poblado de Indiana, donde es muy respetado y estimado. Está a punto de desposar a Emily (Joan Cusack), su virginal novia de los últimos tres años. Todo parece en armonía, pues además uno de sus ex alumnos favoritos, Cameron Drake (Matt Dillon), convertido en una estrella de Hollywood, está nominada al Oscar con muchas probabilidades de ganarlo. Y así sucede. El problema es que Cameron, en sus agradecimientos, revela a todo el mundo lo que incluso Howard ignora: que es gay. De la noche a la mañana toda su vida cambia, mientras lo persiguen las cámaras de televisión y lo acosan las suspicacias de su novia, sus padres, sus alumnos y sus amigos .
Frank Oz, el realizador de IN&OUT, se ha mostrado en la decena de películas que ha dirigido (“The Muppet take Manhattan”, 1984; “Muppet treasure island”, 1994, “The indian in the cupboard”, 1995) como un modesto artesano [1]÷de encargos, como hay numerosos en Hollywood. No obstante, IN&OUT seguramente le significó una buena oportunidad para procurarse puntos y proyectarse un poco más, pues la cinta tiene un buen reparto (Klein, Dillon, Debbie Reynolds, Tom selleck), o al menos mejor que el que tendría una presunta tercera parte de las aventuras de la Rana René y sus amigos, lo cual por otra parte no es difícil.
Por su parte, Klein ha demostrado varias veces solvencia para encarnar distintos personajes, tanto en comedias (“Los enredos de Wanda”), como en otros géneros (“La decisión de Sophie”, “Grand Canyon”, “Silverado”). Es posible que Klein haya podido moverse con bastante libertad bajo las órdenes de Oz. Por eso también es razonable el hecho de que Klein se vea muyó simpático como un profesor que tendrá que poner a prueba su virilidad (una de las secuencias mejor logradas es cuando literalmente la pone a prueba, a través de un test por correspondencia).
Por último, cabe advertir que existen unas breves intervenciones de Whoopi Goldberg y Glenn Close. In&Out es una película a la que no hay que exigirle mayores pretensiones salvo, claro está, la de reír un poco.

