Por Miguel Ravelo
La onceava edición del FICUNAM continúa exhibiendo en línea y de manera gratuita algunas de las más interesantes propuestas cinematográficas de la actualidad. Optando por un certamen completamente virtual, el Festival se adapta a las circunstancias sanitarias mundiales, ofreciendo el cine de calidad que ha caracterizado sus anteriores encuentros, pero ahora llevándolo hasta los hogares de los espectadores.
La competencia internacional del Festival está compuesta por películas de latitudes tan diversas como India, Rumania, Vietnam, Estados Unidos, España, Francia, Suiza, República Dominicana o Grecia, entre otros. “Seguir adelante”, la propuesta que hoy nos ocupa, llega a México desde Corea del Sur, país que recientemente tuvo uno de los más importantes momentos de su historia cinematográfica gracias al éxito y premios obtenidos por la cinta “Parásitos”, de Bong Joon-ho.
Desde hace años, Corea del Sur ha ofrecido un cine vanguardista y estimulante pero que no muchas veces era consumido fuera de círculos especializados, por lo que el éxito de la cinta de Joon-ho es más que bienvenido para provocar en el público occidental curiosidad por explorar el cine y los autores de ese país. También es de esperarse que realizadores que hasta ahora no habían podido exhibir sus cintas más allá de sus fronteras, consigan una valiosa ventana para que los públicos de todo el mundo puedan apreciar sus obras. “Seguir adelante” (“Moving On”, 2020), ópera prima escrita, producida y dirigida por Yoon Dan-bi, es una de esas propuestas que se espera obtengan, además de reconocimientos para sus realizadores, un cálido recibimiento por parte del público de los países en los que sea exhibida. Es una historia entrañable que explora las costumbres y tradiciones familiares en el oriente, enfrentando la visión de una joven adolescente con el papel de un hombre de la tercera edad dentro de la dinámica familiar.
“Seguir adelante” cuenta la historia de una familia en la que el padre (Yang Heung-ju), con el pretexto de las vacaciones de verano y buscando pasar unos días cuidando y atendiendo a su anciano padre (Kim Sang-dong), decide mudarse temporalmente con él, acompañado por sus dos hijos, el pequeño Dong-ju (Park Seung-jun) y su impetuosa y rebelde hija adolescente Okju (Choi Jung-woon), quien se revelará como la protagonista de la cinta y será a través de ella que conoceremos los problemas de cada miembro de la familia. Su mirada nos llevará a ser testigos y entender el proceso de crecimiento de una adolescente dentro de una comunidad que ha enfrentado diferentes y constantes pérdidas, y que además atraviesa una situación económica complicada.
Resulta destacable el trabajo de Yoon Dan-bi, joven directora que muestra una visión sólida y comprometida, preocupada por las diferencias generacionales que muchas veces llevan a los miembros más jóvenes a ignorar o considerar a las personas mayores como una carga con la que hay que lidiar diariamente. A través de la mirada de Okju y de los cambios por los que atraviesa al entrar a la adolescencia, la directora desmenuza a una familia cuyos miembros son personas amorosas y que se interesan por sus familiares, pero cuya complicada situación de vida los lleva a encerrarse en ellos mismos evitando ser vulnerables o enfrentar los problemas cotidianos. Con una visión amorosa hacia sus personajes y realizando una efectiva mancuerna con Kim Gi-hyeon, su director de fotografía, la directora consigue escenas costumbristas enmarcadas por secuencias reflexivas y pausadas. Fragmentos de vida familiar en las que poco a poco puede descubrirse un análisis profundo de las preocupaciones de cada uno de sus miembros, desde el pequeño Dong-ju hasta el abuelo enfermo que una vez fue el pilar de la familia y al que hoy todos ignoran por atender sus propios problemas.
La directora realiza un análisis conmovedor y reconocible sobre las dinámicas familiares, en donde confronta al mismo tiempo comportamientos egoístas con otros dedicados y amorosos. La joven Okju ha enfrentado momentos muy duros como la hija adolescente dentro de esta familia, pero es claro que las dificultades continuarán existiendo y serán muchas veces peores; será decisión suya elegir la forma de afrontarlos como parte de su todo, de su familia. Con sus bien dibujados personajes y trazando una familia en la que no resulta difícil identificarse, “Seguir adelante” se revela como una ópera prima de una formalidad y una sensibilidad destacables.
FICUNAM continuará exhibiéndose hasta el 28 de marzo en diversas plataformas como Cinépolis Klic, MUBI, Filmoteca en línea, Tonalá TV, TV UNAM y Canal 22. Consulte la programación en ficunam.unam.mx