Por Déborah Farjí Núñez
Basada en la obra homónima del escritor David Lindsay-Abaire (Premio Pulitzer 2007), Rabbit Hole -aún sin título en español- es la nueva película del norteamericano John Cameron Mitchell (Shortbus: tu última parada, 2006). La cinta cuenta la historia de un matrimonio joven que ha perdido a su único hijo de 4 años en un accidente. Nicole Kidman (Australia, 2008) y Aaron Eckhart (Batman: el caballero de la noche, 2008) dan vida a Becca y Howie, los padres que tras ocho meses del trágico acontecimiento no han dejado de asistir a su grupo de terapia y se han alejado prácticamente del mundo externo.
Con tomas bellamente compuestas, una edición y ritmo fluido, descubrimos cómo la pareja construye una fachada de normalidad, aunque el recuerdo de su hijo y el dolor comienza a fragmentar su relación. Se trata de un mood film (película de ánimo) debido a la fuerte carga emocional que se despliega a través de la trama. Kidman ofrece una vez más su talento, el cual le ha valido recibir hasta ahora 9 nominaciones como mejor actriz protagónica, entre ellas una al Oscar, por el cual competirá el próximo domingo 27 de febrero. En este rol, desdibuja incluso su belleza física, para internarse en el sufrimiento de una madre que no sabe como acallar su dolor, despertar cada día y seguir con su vida, sumergiendo al espectador en su conmoción.
Cabe mencionar, el mérito a la actuación de Eckhart, pues comúnmente este tipo de historias se relacionan con el sufrimiento femenino, pero pocas veces se profundiza en el duelo del padre. En esta ocasión, logra conectar con la emoción y proyectarla de manera muy viva, lejos de la fuerza y el dominio asumidos a la figura masculina.
Este drama, sin mayor parafernalia y con un modesto presupuesto (5 millones de dólares) comparado con otras producciones estadounidenses, devela la trama como la vida misma. Es posible que no deje mayor resonancia cinematográficamente hablando; sin embargo, tiene el acierto de vincularnos a un fragmento de la vida de estos personajes en donde no hay principio ni fin definido, cuyas reacciones sorprenden y su ánimo cambia constantemente -al grado de ser desesperante-, resultando contradictorio a la lógica pero muy coherente con el desasosiego.
Destaca también la presencia de Dianne Wiest (En Terapia -serie TV-, 2008/9) quien da vida a Nat, la madre de Becca, una mujer que acompaña y comprende la situación de su hija ya que la ha vivido en carne propia. Junto con Kidman, Wiest es otro buen ejemplo de camuflaje, logra borrar su imagen pública con una interpretación limpia, sencilla y muy veraz.
Si bien ésta no es una película muy atractiva, vale la pena verla por su realismo y calidez; una buena manera de darle forma a una historia y transmitir el duelo de su creador.
(Mitchell perdió a su hermano cuando era pequeño y, a pesar de los años, asegura que su familia aún continúa reponiéndose)
Rabbit Hole
País: USA Año: 2010 Género: Drama Productora: Blossom Films / Fox Searchlight Pictures / Olympus Pictures Director: John Cameron Mitchell Guión: David Lindsay-Abaire Fotografía: Frank G. DeMarco Reparto: Nicole Kidman, Aaron Eckhart, Phoenix List, Sandra Oh, Dianne Wiest, Giancarlo Esposito.