Por Leticia Carrillo
Después de su paso por certámenes nacionales e internacionales en los que obtuvo 17 importantes galardones como el Leopardo de Oro en Locarno; sendas Menciones Especiales en San Sebastián y Miami; el Coral a la Mejor Ópera Prima en La Habana y el Premio del Público y a la Mejor Película Latinoamericana del FICCO; llega a los cines mexicanos Parque vía, la ópera prima de Enrique Rivero.
El director afirmó que su película, sin la participación de su protagonista Nolberto Coria (Beto) no se hubiera podido realizar ya que además de que este hombre vivió en unas circunstancias parecidas a las que se retratan en el filme, trabajó en el aspecto actoral de la mano con el realizador, y su labor fue reconocida en el Festival des 3 Continents en Nantes, Francia: “Ese tipo de humildad, como la de Beto, es lo que hace que se merezca cosas como esas”.
En este sentido, Rivero mencionó que la realización de la cinta dependió de la “sensación de inmediatez y la necesidad de expresión que en un momento determinado tenía”, ya que, afirmó, en otro tiempo no la hubiera hecho tal y como quedó: “la casa ya se vendió, Beto ya se fue a Michoacán y mi mamá (quien interpreta a la dueña de la casa) ya se murió”.
Acerca de los premios y su estreno comercial en el país el cineasta expresó: “La película toma su propio camino, yo no puedo intentar meter gente a la salas, por eso no tengo expectativas de ningún tipo y tampoco los premios dependen de mí pero sí soy consciente de que sirven para hacer ruido y abrir puertas como sucedió a partir de Locarno”.
Sin embargo, el realizador consideró que Parque vía sí ha gustado y prueba de ello es que ya se vendió a países como Venezuela, Israel y Bélgica y se estrenó en Francia y España.
Respecto a la reacción del público del viejo continente, Enrique Rivero opinó: “allá se fijan mucho en la parte de la crítica social de la película, yo creo que lo hacen para sentirse en su comodidad europea”. Aunque aceptó que en su filme el tema del conflicto entre clases sociales sí está presente “pero no de una manera premeditada”.
Y sobre la pertenencia a lo que algunos consideran “la escuela de Carlos Reygadas (Japón)” el también productor señaló: “Lo que él hizo fue cambiar la manera de producción de la películas en México a través de la cual con pocos recursos, se pueden hacer cosas muy interesantes siempre y cuando se tengan las ideas muy claras de lo que se quiere pero yo creo que no le hacemos ningún favor colgándonos de su nombre”.
“Es coyuntural que Reygadas sea mexicano y que ahora sea uno de los exponentes más importantes del cine a nivel mundial pero también se podría mencionar la obra de directores como Jaime Rosales ó Alberto Serra, que hace este tipo de cine pero con actores, o Bruno Dumont que viene haciendo lo mismo desde hace muchos años”, añadió Rivero.
A pesar de ello, reconoció que a su cinta los espectadores pueden encontrarle similitudes con la obra de por ejemplo, Amat Escalante: “más que a Los bastardos, a la cual considero una obra maestra, me parece que tendría puntos en común con Sangre” y agregó que su primer referente en el cine fue el polaco Kristof Kieslowski.
Enrique Rivero detalló que la razón por la que en Parque vía trabajó con no actores es porque “ciertas situaciones se requiere otro tipo de verosimilitud, yo quería centrar la atención en la persona, no en el personaje”.
El director refirió que “cuidó mucho” a su ópera prima y también lo hará con su siguiente proyecto Mai moriré (Nunca moriré, en italiano) en la que buscará que la historia se cuente principalmente a través de la asociación de planos.
Acerca de su decisión de regresar de España donde estudió cine, el cineasta apuntó que el proceso de la realización de Mamoriré requiere que esté aquí y además estimó que el país ibérico “no anda nada bien en cuanto a financiamiento de proyectos se refiere”.
Por último, contó que su formación como ingeniero, le ayudó a la hora de conseguir dinero para hacer Parque vía “porque mucha gente considera a los ingenieros como gente capacitada para manejar dinero”.
Parque vía se podrá ver a partir del viernes 4 en Cinépolis Perisur y Universidad; Cinemex WTC y Mundo E; Cinemark Reforma 222; Cineteca Nacional y Cinemanía.