Las telenovelas han sido y son programas de televisión que marcan toda una época, tanto para las empresas productoras y los artistas que participaron en su creación, como para los espectadores.
Su primer éxito tuvo diferentes razones muy concretas, además de que no existía la competencia que existe en la actualidad. Hoy los usuarios tienen una gama muy amplia de donde elegir qué hacer en sus momentos de ocio y distracción, que van desde ver televisión, disfrutar de series y películas, jugar videojuegos y apostar en casino.netbet.com.mx, entre otras muchas actividades. Sin embargo, las telenovelas siguen vigentes.
Las historias de larga duración
Sin duda, uno de los atractivos más importantes de las antiguas telenovelas mexicanas era su larga duración. Estas telenovelas se transmitían en la televisión abierta y en su mayoría estaban especialmente dedicadas al público femenino.
Todo comenzó en la década del cincuenta con las producciones de Telesistema Mexicano (aunque sus predecesoras fueron las radionovelas). Algunas de las más exitosas de ese momento fueron “Senda prohibida”, “Más allá de la angustia”, “Cadenas de amor”, “Mi esposa se divorcia” y “Teresa”, entre otras.
Telesistema Mexicano y Televisión Independiente de México fueron las empresas que produjeron muchos éxitos dentro del mundo de la telenovela en el país. A principios de los años setenta, llegan Televisa y TV Azteca que se hacen responsables de otra gran cantidad de telenovelas que marcaron una gran época de producciones nacionales en la TV local, y que todavía continúan en la actualidad.
Hoy en día, es importante destacar que las telenovelas mexicanas ya no están dirigidas principalmente al público femenino. Además, tienen un concepto mucho más abierto respecto a los temas que tocan en los guiones y se realizan con el objetivo de que también sean un producto para exportar.
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Subgéneros de las telenovelas mexicanas
Las telenovelas mexicanas tienen sus propios subgéneros entre los que se destacan el primero de todos: los culebrones. Se identifican por su tono melodramático, y porque siempre son de larga duración. También están las novelas infantiles, juveniles, las costumbristas, las educativas y las comedias que generalmente incluyen otros subgéneros.
¿La telenovela es un género en transformación?
Tanto las telenovelas mexicanas como las que se producen en otros países siguen estando vigentes, pero con una transformación importante en lo que se refiere a ser un producto para consumo local e internacional. Esto hace que sus guiones se hayan adaptado a los tiempos actuales con una renovación muy importante de los temas y el contenido.
Naturalmente, los escritores de telenovelas no dejan de lado los temas que hacen una diferencia sustancial con relación a otros programas de televisión, como pueden ser las historias muy románticas con emoción y drama. Sin embargo, agregan temas de actualidad y más profundidad al contenido.
La telenovela es un género establecido en México
La telenovela mexicana logró sobrevivir a una gran variedad de competidores que la acecharon en diferentes momentos del siglo XX y también del siglo XXI. Este género dio a luz a éxitos arrasadores en el país y en el extranjero, como “Rosa Salvaje”, “Simplemente María”, “María Mercedes”, “Marimar”, “María la del barrio”, “La usurpadora”, “Rebelde”, “Amor Real”, “Rubí”, “La madrastra” y “Mirada de mujer“, entre otras,
Las siguientes son algunas de las que fueron lanzadas este año: “Vencer el miedo”, “Te doy la vida”, “Imperio de mentiras” y “La mexicana y el güero”.
Conclusión
La telenovela mexicana es considerada una institución en este país y en todos los países a los que han sido exportadas. Afortunadamente, gozan de buena salud porque los equipos de creadores y productores que las desarrollan supieron actualizarlas en su contenido, sin eliminar lo que las convierte en una telenovela de la más pura cepa.