La sonidista argentina Juana Sapire presentó por primera vez en México, a través de Ambulante 2007, el documental México, La Revolución congelada, un estreno con un retraso de 36 años, luego de que en los años 70 ella y el realizador Raymundo Gleyzer fueran considerados personas ‘non gratas’.
“Me gustaría ir nuevamente a los lugares donde rodamos este proyecto y mostrárselo a todos los mexicanos, y si tuviera la tecnología a mi alcance le mejoraría la calidad del sonido y la imagen, para mí hoy ver esta sala llena es lo mejor que me ha pasado después de la creación del `cine de la base’, una manera de mostrar el cine de manera itinerante”, manifestó Sapire.
Viuda de Gleyzer, Sapire en declaraciones a la prensa manifestó que si pudiera también le gustaría hacerle llegar al comandante Marcos esta película con la idea de que se difunda y se muestre a los campesino de la zona chiapaneca.
El documental prohibido por Luis Echeverría cuando fue presidente de México, fue exhibido este domingo como parte de Ambulante 2007 y al finalizar la proyección se llevó a cabo un diálogo entre los más de 100 asistentes y Sapire. Entre los comentarios destacó que este material es sólo una parte que abarca las Revoluciones latinoamericanas.
“Empezamos con México porque a nuestro parecer era la más importante y justo en esos días acababan de pasar las manifestaciones estudiantiles, repercusiones del despertar del consciente con origen en Francia”, indicó.
El documental inicia con imágenes de la campaña priista del entonces candidato presidencial Luis Echeverría y abarca el suceso estudiantil de Tlatelolco desde 1968 al jueves de corpus de 1971, y registra el desgaste en ese entonces del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y ofrece además una mirada retrospectiva a la empobrecida zona sureste mexicana.
Este trabajo fue alentado por el mismo Echeverría, quien orgulloso aceptó que un equipo de televisión extranjero se interesara en él, pero luego de su estrenó en Buenos Aires, Argentina, en 1971, enfureció y mediante su embajador en la tierra gaucha solicitó que se prohibiera el material.
Sólo duró un día en cartelera, recuerda Sapire y fue enlatado desde ese entonces, ahora 36 años después llega a las salas comerciales gracias a la gira Ambulante 2007.
Después de la desaparición a manos de la dictadura argentina del cineasta militante Gleyzer, el cine de la base que consistía en llevar películas a los obreros y campesinos, “desapareció y yo me sentía fatal, pensé que moriría, hoy sé que faltaba mucho por hacer” , relató Sapire, quien actualmente vive en Manhattan, en Estados Unidos.