Por Luy Mier

¡Cácaro!.  Las esperanzas del cine mexicano en 2008 han estado cifradas
en unas cuantas películas, de la cincuentena que, presumiblemente,
podría estrenarse. El éxito de taquilla que acaba de hacer La misma
Luna, de Patricia Riggen, tal vez sea el más fuerte para el cine
nacional en el año, pues otros filmes de los que se esperaba mucho,
como Casi Divas, a penas cumplieron con las metas a pesar de su intensa
campaña. 

Han desfilado, sin embargo, con más pena que gloria otros filmes que
merecían mejor fortuna: La Zona, de Rodrigo Plá; Párpados Azules, de
Ernesto Contreras; El Cobrador, de Paul Leduc; Partes Usadas de Aarón
Fernández; La Sangre Iluminada, de Iván Ávila;  Ladrones Viejos, de Eeverardo González; Quemar las naves,
de Francisco Franco. Tal vez salvo esta última, las demás parece que
nunca se estrenaron. Si uno le pregunta a un ciudadano cualquiera, les
sonarán esos títulos totalmente extraño.

Pero quizás no se ha dicho la última palabra sobre los etsrenos
nacionales del año. Una de las apuestas fuertes para la taquilla que
está por venir es
Arráncame la Vida, producida por Altavista Films y basada en la novela
de Ángeles Mastretta, bajo la dirección de Roberto Sneider. El filme es
protagonizado por Ana Claudia Talancón.

No hay que descartar otras películas que pueden dar de qué hablar como
Cosas Insignificantes, de Andrea Martínez, y Violanchelo, de Alfonso
Pineda, ambas con Bárbara Mori en su lanzamiento definitivo dentro del
cine mexicano. Las cintas las producen, respectivamente, Guillermo del
Toro y los hermanos Rovzar. En el circuito de filmes debe tomarse en
cuenta la exitosa cinta de Fernando Eimbcke, ¿Te acuerdas de Lake Tahoe?.

La cifra de 43 películas mexicanas estrenadas el año pasado
estableció una nueva marca de los últimos años: fueron 28 estrenos
nacionales en 2006, y 24 en 2005, los más altos en los sexenios de
Vicente Fox y Ernesto Zedillo. ¿Se está moviendo al alza la exhibición
de cine mexicano?. Parece que en cuanto a cantidad así es, pero hay que
esperar para saber si sucede lo mismo en su calidad.

…Sin Nombre es el título de la cinta realizó el director
estadounidense Cary Fukunaga, con locaciones en México. Se trata de una
producción de Focus Features, apoyados por el eficiente equipo de
Gerardo Barrera, con una participación menor de Canana, la compañía de
Gael García y Diego Luna. Es una historia ambientada en el mundo de las
maras salvatruchas, cuyo protagonista es un actor hondureño, Edgar
Flores, quien encarna a uno de estos pandilleros que intenta salir de
ese mundo y por eso es perseguido por los vándalos centroamericano. 

Hay
una trama paralela de otros migrantes que cruzan México. En el filme
participa Luis Fernando Peña. Las locaciones en México han permitido
recrear desde la ciudad de Tegucigalpa, por el rumbo de Naucalpan,
hasta la texana McAllen, en una zona de Texcoco. La cinta tiene un
presupuesto de unos 5 millones de dólares, cifra que dobla la media
nacional aunque, desde luego, muy por debajo del promedio gringo.