Por Ernesto Medina

La amistad, el amor, los celos, la infidelidad y la traición son temas
presentes en la película El búfalo de la noche (México, 2007), historia
escrita y producida por Guillermo Arriaga, que marca el debut
cinematográfico del director venezolano Jorge Hernández Aldana.

La historia nos presenta a Gregorio (Gabriel González), un joven que
padece esquizofrenia y que mantiene una relación amorosa con Tania (Liz
Gallardo), así como una amistad entrañable con Manuel (Diego Luna);
triangulo que sufrirá una ruptura irreparable provocada por la traición.

La obra literaria El búfalo de la noche, editada en 1999 y reimpresa en
2006, es la tercer novela del escritor mexicano; historia que, para su
versión cinematográfica, fue adaptada por el mismo Arriaga y Hernández,
autores que ponen rostro a sus personajes.

Se dice que difícilmente la versión cinematográfica de una historia
superará la obra literaria y El búfalo de la noche no es la excepción,
también, se dice, que esto no es posible porque son dos lenguajes
distintos; el literario cuenta con recursos y elementos narrativos muy
amplios a través de las palabras, y sobre todo, con la imaginación de
los lectores.

El lenguaje fílmico cuenta con sus técnicas propias, que para lograr
una dramaturgia visual trascendente, se requiere de gran talento a la
hora de retratar imágenes, así como para dar voz al diálogo de los
personajes, ambientar los espacios dramáticos y dar sonido a la
geografía de las locaciones.

En la película El búfalo de la noche esto no se da de manera favorable,
durante el desarrollo no existe una tensión narrativa que atrape, el
uso reiterativo del flashback no proporciona el clímax que dé mayor
emoción al filme y el diálogo constante de los protagonistas, a través
de rostros fragmentados en un campo contra campo, no es suficiente para
cautivar la mirada.

El ritmo lento en la narrativa de la cinta y lo poco descriptivas que
resultan algunas secuencias, son elementos que no benefician en el
progreso de la historia.

La actuación de la debutante Liz Gallardo y la breve participación de
Camila Sodi no convencen en su accionar histriónico, ya que no hay un
profundo entendimiento de sus personajes.

En la cinta participa en la fotografía Héctor Ortega; en la edición,
Alex Márquez; en el diseño de sonido Frank Gaeta; en la música
original, Mars Volta y fue filmada, durante el mes de enero de 2006, en
locaciones de la Ciudad de México.

El búfalo de la noche se estrenó comercialmente a nivel nacional el
pasado viernes, con 300 copias, una de ellas se proyecta en la Cineteca
Nacional de martes a domingo a las 16:30, 18:45 y 21:00 horas.