Primera parte
Ulises Pérez Mancilla/Enviado
Morelia, Mich.- El Festival Internacional de Cine de Morelia tiene su antecedente inmediato en las Jornadas de Cortometraje Mexicano. De ellas heredó la noble y responsable tarea de abrir espacio a los cineastas jóvenes del país que en el formato del corto, veían la posibilidad de echar a andar los cimientos de su carrera, de tentar el camino sobre qué tan capaces serían de contar una historia, de qué tan valientes serían para echar a andar un largo, o simplemente para medir su perseverancia detrás del acariciado sueño. Hoy, la gama es amplia y el formato está más que consolidado en el país, no sólo existen concursos institucionales para producir cortos, hay una gran veta en las escuelas, no sólo del CCC y del CUEC, se ha descentralizado ya su producción, permitiendo que realizadores de otros estados tomen su cámara y filmen o graben. Los hay experimentales, documentales, contemplativos, académicos, de animación. E incluso, se ha roto con el prejuicio de que los cortometrajes son para los debutantes o la antesala de una ópera prima. Nada más falso y para muestra, cada vez más abundan los cineastas consolidados que ven en el corto la gentileza de poder revitalizarse, de fortalecer sus inquietudes y reafirmar su fe y su pasión.
A partir de hoy, todos los días, Correcamara.com tiene la reseña crítica de los cortometrajes en competencia en ésta, la octava edición del FICM.
LUNA
Cortometraje de animación realizado impecablemente por Raúl y Rafael Cárdenas. Extraño y cursi, pero demasiado elaborado para robarse el corazón. Ganó en Guadalajara el premio al mejor corto animado.
UNA HABITACIÓN VACÍA
Dirigido por la cecera Diana Peñaloza y producido por Alejandro Gerber, director de Vaho. Un niño vive obsesionado con su abuelo enfermo, encerrado en la habitación contigua. El corto cuenta los intentos del niño por entrar al cuarto, hasta que se decide y encuentra lo que el título nos había predicho desde el tercer plano: “una habitación vacía”. El abuelo muere y pese a la correcta realización, hay tantas acciones fortuitas en la historia que hacen (mal) pensar que emocionalmente, no sólo la habitación estaba vacía.
LA MINA DE ORO
De Jacques Bonavent. Es la historia de una mujer que se compromete con un hombre por Internet y deja todo en la vida para ir a buscarlo al último rincón del mundo sólo para llevarse la gran sorpresa de que todo era una estafa. En la sala con público fue la más aplaudida, debido a su solvencia narrativa y a la siempre talentosa Paloma Woolrich en su eterno papel de solterona medio ida.
A pesar de pertenecer al molesto género de la vuelta de tuerca, lo apreciable es aquí es que ésta se origina en el tono que de tragedia arriba sutil y exitoso a la comedia negra.
GLOBO AZUL
Aun estudiante del CCC, Isabel Acevedo se tropieza con su historia sobre el despertar sexual de una alumna en un colegio de monjas. Se entiende su postura crítica a la arcaica estructura moral de la iglesia pero no logra consolidarla entre diálogos y situaciones atípicas que más que falta de talento, se debe a un nervioso y temprano debut, que se refleja en su interminable lista de agradecimientos a amigos y familiares en los créditos finales.
LUPANO LEYVA
Dirigido por Felipe Gómez, es el bien graduado corto de la pasada generación ganadora del concurso convocado por el IMCINE. De buena factura, ingenioso y con gran elenco: Roberto Sosa, Gerardo Taracena, Mario Zaragoza. Filmado en blanco y negro, se une a la cola de historias bicentenarias contando la agonía de un revolucionario que se niega a morir y ve pasar su vida en viñetas. La historia en sí es el tradicional corrido de un héroe anónimo.
SI MANEJA DE NOCHE PROCURE IR ACOMPAÑADO
Otro corto del IMCINE. De la destacada sonidista cecera, Isabel Muñoz, que ya ganó un Ariel por mejor corto documental (Su mercé). Su propuesta de contar una anécdota con los personajes manejando un auto de noche es atractiva e impone retos de realización, pero su historia da para poco, pues muy pronto se enfrasca en diálogos urbanos existencialistas que no trascienden la quejumbre de un mal día. La anécdota se queda a medio camino, como que si se hubiera partido de: “Y si filmamos a dos weyes manejando y…”, nada más.
THE SECOND BAKERY ATTACK
Carlos Cuarón presenta un corto amable. Una comedia romántica de producción norteamericana que pone toda la artillería internacional que le da el apellido Cuarón y una nominación al Oscar. Congruente con sus problemas adolescentes en el más refinado estilo de Y tu mamá también, presenta a Kirsten Dunst como una esposa preocupada por salvar su matrimonio a través del robo de una hamburguesería. Oficio puro y jocosidad gringa de por medio.
EN LA IMAGEN: Fotograma de Lupano Leyva
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