Por Hugo Lara Chávez
Desde Cannes
 

La 67 edición del Festival de Cannes fue inaugurada la noche de este miércoles con el decepcionante biopic sobre la princesa “Grace de Monaco” estelarizada por Nicole Kidman como Grace Kelly y Tim Roth como el príncipe Rainiero. El filme es dirigido por el francés Olivier Dahan, el mismo que conquistó la taquilla hace unos años con “La Vie en Rose” (2007), otro biopic pero centrado en la atormentada cantante Edith Piaff. En  otra proyección de la sección de competencia de la jornada se presento “Timbuktu” del realizador mauritano Abderrahmane Sissako, un filme que se llevo los aplausos de la prensa y que narra la desgarradora historia de una familia que vive los efectos y la crueldad de la intolerancia, cuando los fundamentalistas islamistas toman el control de su pueblo e imponen nuevas y férreas reglas.

“Grace de Mónaco” narra las vicisitudes de la actriz Grace Kelly para adaptarse a su nueva vida de princesa europea al lado de su marido, el príncipe Rainiero. La trama inicia cuando Alfred Hitchcock la visita para ofrecerle un contrato millonario para regresar a Hollywood en la pelicula “Marnie”. Tentada en un inicio por la oferta, Grace logra convencer a su marido que se lo permita, pero las intrigas palaciegas y un grave conflicto político con Francia, la ponen en una nueva disyuntiva.

La película de Dahan se embelesa con la presencia de Kidman como la legendaria rubia Grace Kelly, pero el director no logra sacarle el mismo jugo dramático como si lo hizo con Edith Piaff, todo por una cuestion evidente: salvo al momento de su muerte en un accidente automovilístico, Kelly no estuvo marcada por un sino trágico, sino a lo sumo por los chismarajos de las revistas del corazón. Con esta dificultad, el director y su guionista, Arash Amel, arman una trama paralela de corte político, una presunta conspiración para destronar al príncipe Rainiero por parte de su hermana, así como una inflada confrontación con Francia y su presidente Charles de Gaulle que hace que la Guerra Fría parezca poca cosa.

El filme recibió fuertes críticas por parte de la familia Grimaldi de Mónaco, que la considera puras patranas, mientras que la prensa la recibió con frialdad y en general la calificó como de bajo nivel para ser el filme inaugural en Cannes. Eso si, el nivel de producción en todos sus departamentos (vestuarios, escenarios, arte, etc) es bastante bueno.

Mientras tanto, “Timbuktu” es un filme que resulta todo lo opuesto: sencillo, nada glamouroso y que aborda una temática muy polémica hoy en día, acerca de los extremistas religiosos del islam que gobiernan con la intolerancia y violencia hacia las mujeres y a los que faltan a sus rígidas normas, muchas veces llevadas al absurdo, como la prohibición de la música o del futbol. Es un filme que a pesar de su dureza tiene varios momentos de gran cine, otros tantos de humor y lo mejor es que logra construir personajes entrañables y sólidos, en el ambiente de un pueblo pobre y rural.

Por Hugo Lara Chávez

Cineasta e investigador. Licenciado en comunicación por la Universidad Iberoamericana. Director-guionista del largometraje Cuando los hijos regresan (2017). Productor del largometraje Ojos que no ven (2022), entre otros. Director del portal Correcamara.com y autor de los libros “Pancho Villa en el cine” (2023) y “Zapata en el cine” (2019), ambos con Eduardo de la Vega Alfaro; “Dos amantes furtivos. Cine y teatro mexicanos” (coordinador) (2015), “Luces, cámara, acción: cinefotógrafos del cine mexicano 1931-201” (2011) con Elisa Lozano, “Ciudad de cine” (2010) y"Una ciudad inventada por el cine (2006), entre otros.