“… jugar con la cantaleta ética de la ambición y el dominio de los dinosaurios para lucrar con ellos…”

Por José de Jesús Chávez Martínez

Los dinosaurios ya son un clásico pues nunca pasan de moda, por eso en el cine se les ha explotado de manera más notoria a partir de la exitosa saga ideada por Steven Spielberg y Michael Crichton, e iniciada en 1993 con la cinta “Parque Jurásico” (“Jurassic Park”, aquella joyita de la ciencia ficción y el horror). Lo que vino después ha sido una serie de devaneos, aunque no faltos de emoción y atractivo por los efectos especiales para recrear a esos antiquísimos animales. Recordemos que hubo tres cintas de “Parque Jurásico” (I, II y III) y varios años después otra trilogía: “Jurassic World”, “Jurassic World el Reino Caído” y la más reciente “Jurassic World Dominion”.

El director Colin Trevorrow se embarca en su segunda dirección de una película de la serie interviniendo también en la elaboración del guion (antes dirigió “Jurassic World” en 2015). El atractivo de esta (aparentemente) última entrega es que además de los protagonistas “modernos” que repiten por tercera vez, Bryce Dallas Howard, en el papel de Claire Daring y Chris Pratt como Owen Grady, se reinserta al reparto al trío original de actores pioneros, legendarios ellos también, encarnando a sus respectivos personajes: Sam Neill como el Doctor Alan Grant, Laura Dern en el rol de la Doctora Ellie Sattler y Jeff Goldblum interpretando al Doctor Ian Malcolm.

Las emociones, la acción y el peligro no faltan y no decepcionan a sus seguidores, como siempre, sin escatimar en producción y diseño artístico. Sin embargo, es más de lo mismo: jugar con la cantaleta ética de la ambición y el dominio de los dinosaurios para lucrar con ellos ante un empresario ambicioso y tramposo como antagonista de los científicos que rechazan toda idea de un posible abuso hacia los animales vueltos a la vida después de millones de años.

El ladino magnate Lewis Dodgson (Campbell Scott), dueño de la corporación “Byosin”, hace experimentos con langostas enormes para que aniquilen cultivos vegetales y promover sus productos alimenticios sin rival alguno; todo con la ayuda del Doctor Henry Wu (B. D. Wong), que ya ha mostrado su falta de escrúpulos como genetista en las anteriores dos películas del World dinosáurico. Además Dodgson manda secuestrar a la adolescente Maisie Lockwood (Isabella Sermon) para experimentar con ella; es aquella niña que fue clonada de su madre ya fallecida y vivía con su abuelo (en el Reino Caído), una especie de tesoro mundial que está bajo el cuidado estricto de Owen y Claire en una cabaña remota.

Maisie, ya raptada, es trasladada a Malta y luego al intrincado cuartel general de “Byosin”, en la cordillera de los Dolomitas en Italia. A este lugar es donde llegan Ellie y Alan para investigar clandestinamente lo de las langostas y se encuentran con la sorpresa de que Malcolm trabaja ahí, pero con la misma intención de averiguar furtivamente las truculencias de Dodgson, por lo que vuelven a hacer equipo.

Mientras, Claire y Owen van en busca de Maisie con la ayuda de la mercenaria experta en aeronaves Kayla Watts (DeWanda Wise). Los tres llegan accidentadamente a la sede de “Byosin”, que está rodeada de bosques llenos de dinosaurios terroríficos, y comienzan la aventura con la ayuda de los otros tres personajes clásicos, los de Neill, Dern y Goldblum que ya han encontrado a Maisie. Cuando se conocen, es un momento emocionante sin duda.

Sin embargo, “Jurassic World Dominion” no está exenta de lugares comunes y de elementos narrativos predecibles, aun cuando se esfuerza en criticar a la ambición corporativa, a la ciencia misma con sus experimentos genéticos y a la comercialización de especies animales que en el relato ya ha anexado a los dinosaurios como productos en el mercado negro, eso sí, en un país poco desarrollado como Malta.

Igualmente esta cinta es pródiga en clichés, sobre todo en el aspecto familiar. Vemos que Ellie y Alan escarcean un reencuentro amoroso pendiente que data de hace casi 30 años; la velociraptor Blue ya ha tenido una cría (que por cierto también es secuestrada junto con Maisie) y ambos retozan felices, matando a un lobo, en el mismo bosque donde viven Claire y Owen, y estos ya forman una familia con su hija adoptiva Maisie, aunque la chica les recrimine y les desobedezca, pues no son sus padres naturales. A ello le agregamos el poco creíble arrepentimiento de Wu que decide reparar lo que ha hecho en “Byosin” en detrimento de la alimentación mundial. Y así más frivolidades.

Otras cosas también inverosímiles incluyen los escapes con cierta facilidad ante la amenaza de los más peligrosos monstruos, o cómo Owen domina con una cuerda, cual cowboy, a un gran Parasaurolophus que en realidad lo hubiera arrastrado como trapo. Además, el planteamiento idealizado de la pacífica coexistencia de los dinosaurios con las criaturas modernas es impensable, sobre todo los herbívoros gigantes: esos sí acabarían con la vegetación (de por sí arruinada por las corporaciones mundiales) en conjunto con los herbívoros actuales.

Lo que salva en algo la historia es la presencia de los veteranos Neill, Dern y Goldblum, que definitivamente eclipsan a Howard, Pratt y Wise, a pesar de su encanto y juventud. Jeff Goldblum se lleva las palmas con su personaje lleno de humor y de cuestionamientos sarcásticos hacia Owen, y por tanto hacia la misma trilogía del mundo jurásico, posterior a la del parque temático de 1993: “¿le hiciste una promesa a un dinosaurio (Blue)?” o “¿eso que llevas en la espalda es un dinosaurio (la cría de Blue)?”.

En fin, “Jurassic World Dominion” es una película para pasar un buen rato, con cierta gracia y una mejoría en la recreación de los dinosaurios. Como dicen por ahí, es “palomera”. La pregunta es si será realmente la última película de la franquicia.

Título original: Jurassic World Dominion. Año: 2022 (aunque se filmó en 2020). Dirección: Colin Trevorrow. Producción: Frank Marshall y Steven Spielberg. Guion: Emily Carmichael y Colin Trevorrow. Historia: Derek Connolly y Colin Trevorrow, basados en personajes de Michael Crichton. Música: Michael Giacchino. Fotografía: John Schwartzman. Montaje: Mark Sanger. Intérpretes: Chris Pratt, Bryce Dallas Howard, Sam Neill, Laura Dern, Jeff Goldblum, DeWanda Wise, Isabella Sermon, BD Wong, Mamoudou Athie, Campbell Scott, Scott Haze, Dichen Lachman, Daniella Pineda, Justice Smith, Omar Sy.

 

Por José de Jesús Chávez Martínez

Comunicólogo egresado de la UAM Xochimilco. Profesor investigador en la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Autónoma de Occidente Unidad Culiacán, con las líneas comunicación y educación, y el cine como dispositivo didáctico, de las cuales se han desprendido diversos artículos científicos y tres libros. Es miembro del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII). Desde 2021 es colaborador de correcamara.com