Foto: “Tampopo”.
Por José de Jesús Chávez Martínez
Algunos viajes por autobús resultan muy largos y hay que hacer algo para sobrellevarlos. Antiguamente había algunas alternativas como dormir, comer, platicar o leer algún libro o revista. Posteriormente, con la aparición de dispositivos para almacenar material audiovisual, paulatinamente se fue instalando equipo de proyección de películas en los camiones de pasajeros foráneos (videocaseteras, reproductores de DVD y sistemas de memoria y almacenamiento) para hacer menos pesado el trayecto.
John Fiji explica: “La curaduría, término usado para la selección de materiales por un experto es una tarea ardua, no solo deberá de hacer a un lado gustos propios sino está obligado a considerar tendencias, temporalidad, métricas, indicadores, datos duros y demás variables que ayuden a determinar el mejor contenido para el usuario” . En efecto, los pasajeros estamos sujetos a dicha selección y a la clasificación que los curadores hacen por géneros, dispuestos estos en un menú en el que predominan películas comerciales (además de conciertos y música) que bien pueden pasar sin pena ni gloria. Sin embargo, en una experiencia personal, he encontrado en varios viajes terrestres diez películas muy recomendables, unas más que otras, que pongo a su consideración.
10. “Prometheus” (Ridley Scott, 2012). Aparentemente es la precuela de Alien el octavo pasajero (1979), también de Scott, enfocado en una nave espacial que viaja en el año 2089 para explorar una luna que pudiera ser habitable para los humanos. La cinta especula con la utópica creación del ADN humano por extraterrestres. No es ni de lejos la mejor película de Scott, pero destaca por sus efectos especiales y su reparto estelar con una sólida actuación de Michael Fassbender.
9. “V de Venganza” (James McTeigue, 2006). Se dice que esta película es una ucronía, una historia que parte de un hecho ya sucedido en el cual se desarrollan sucesos alternativos. Aborda el tema de una sociedad gobernada por una tiranía en la que Evey (Natalie Portman), una heroína, es víctima y cómplice de un (podríamos decir) terrorista enmascarado que se hace llamar simplemente V. Cinta altamente politizada y basada en una novela gráfica de Alan Moore.
8. “Si yo fuera diputado” (Miguel M. Delgado, 1952). La historia de un peluquero de barrio, interpretado por Mario Moreno “Cantinflas”, que deviene en defensor de los desfavorecidos al interesarse por el derecho y la política para así enfrentar a un corrupto empresario. Mas adelante, nuestro héroe se postula para diputado de distrito y cumplir su propia encomienda. Divertida película que aborda el tema de la corrupción y el fraude electoral, e incluye un gag muy disfrutable con Cantinflas dirigiendo una orquesta.
7. “El imaginario mundo del Doctor Parnassus” (Terry Gilliam, 2009). Parnassus (Christopher Plummer) es un actor inmortal que ofrece un espectáculo de feria donde sus espectadores pueden pasar a otra dimensión cruzando un espejo. Su inmortalidad es gracias a un pacto con el diablo que luego le cobrará la factura. Al espectáculo se integrará un forastero llamado Tony (varios actores interpretan a este personaje) que busca en el espejo a su hija. Los mundos paralelos que presenta la cinta son abordados con buena mano y la tragedia de Heath Ledger (Tony) hizo que varios colegas y amigos llegaran a relevarlo.
6. “Ganar, ganar” (Thomas McCarthy, 2011). Mike Flaherty (Paul Giamatti) es un abogado y entrenador de un equipo colegial de lucha olímpica, que por azares del destino se hace cargo de un adolescente, nieto de Leo (Burt Young), un anciano asilado en un hospicio. Mike recibirá dinero a cambio de los cuidados, pero también descubre que el chico, Kyle (Alex Shaffer), es muy bueno para la lucha olímpica y lo integra al equipo escolar. Esta relación se vuelve entrañable y a la vez sufrida cuando Kyle descubre por qué (el maldito dinero) Mike está tan cercano a él. Película sobria en la que Giamatti, como siempre, es una garantía.
5. “Foxcatcher” (Bennett Miller, 2014). Basada y muy apegada en hechos reales, esta historia cuenta cómo el magnate John du Pont (Steve Carell) se obsesiona con la lucha olímpica y ofrece a un medallista de la especialidad, Mark Schultz (Channing Tatum) montar un campo de entrenamiento para conseguir preseas en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988. El problema es el protagonismo de du Pont, quien empieza a celar al hermano de Mark, Dave (Mark Ruffalo), quien también es entrenador. Una tragedia muy bien contada y por la que el comediante Carell recibió una nominación al Óscar.
4. “E. T.” (Steven Spielberg, 1982). Una de las cintas-leyenda de Spielberg, heredera indirecta de “Encuentros cercanos del tercer tipo”, donde los extraterrestres no son monstruos ni vienen a vapulearnos. Se dice que Spielberg creó a E. T. como amigo imaginario luego del divorcio de sus padres; el visitante del espacio en la trama viene a llenar entonces un hueco (la ausencia del padre de Elliot, encarnado por Henry Thomas) y a unir a la familia. Un clásico esencial para los amantes de lo lacrimógeno y de la ciencia ficción.
3. “Güeros” (Alonso Ruizpalacios, 2014). Sombra (Tenoch Huerta) y Santos (Leonardo Ortizgris) estudian en la UNAM, sólo que viven un momento de ociosidad debido a una huelga en la máxima casa de estudios. En eso están cuando la mamá de Sombra, que vive en Veracruz, le manda a éste a su hermano menor Tomás (Sebastián Aguirre) y luego los tres emprenden un viaje por la ciudad en busca de Epigmenio Cruz, el mejor cantautor del mundo (que hizo llorar a Bob Dylan) e ídolo del padre de Sombra, ya fallecido. El periplo se vuelve cuasi documental por una ciudad de múltiples matices, sí, aunque el filme sea en blanco y negro, y los personajes se tornan entrañables. Excelente ópera prima de Ruizpalacios. Gracias curador…
2. “Boyhood” (Richard Linklater, 2014). Esta odisea familiar tuvo la peculiaridad de ser filmada en once años, ya que cuenta la historia de dos niños que viven con su madre divorciada Olivia (Patricia Arquette). Mason (Ellar Coltrane) y Samantha (Lorelei Linklater) van creciendo y van experimentando las cosas que se viven en una sociedad como la estadounidense: videojuegos, convivencias con sus hermanastros y con su padre Mason Sr. (Ethan Hawke), uso de marihuana, crisis económicas y el ingreso a la universidad. Así, se ve el paso del tiempo y el paso de la vida en esta joya de Linklater. Otro punto para el curador.
1. “Tampopo” (Juzo Itami, 1986). Esta película estaba en el género de comedia y afortunada y simplemente “estaba” esta obra maestra. El curador en turno igualmente merece una medalla. Es la historia de una joven viuda, llamada Tampopo (Nobuko Miyamoto), que trabaja arduamente en un restaurante especializado en fideos. Un día llega Goro (Tsutomu Yamazaki), una especie de pistolero urbano y camionero. Goro pide algo de comer y recibe una sopa de sabor horrible. Tampopo debe saber la verdad de su infame sazón y Goro le ayudará a mejorarlo. Itami “adereza” la acción con escenas sin aparente lógica con una pareja que disfruta del amor y la comida.
Y a ustedes amigos lectores ¿qué buenas películas les ha tocado ver en un autobús?
NOTAS
1. Entretenimiento a bordo, ¿Quién programa las películas que se ven en los aviones y autobuses? Recuperado de: https://profeciblog.wordpress.com/2016/05/06/entretenimiento-a-bordo-quien-programa-las-peliculas-que-se-ven-en-los-aviones-y-autobuses/