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Con la participación de especialistas nacionales e internacionales de primer nivel como Eduardo de la Vega Alfaro, Aurelio de los Reyes, Álvaro Vázquez Mantecón, Ricardo Pérez Montfort, el italiano Marco Giusti, de Radio Audizioni Italiane, el británico Sir Christopher Frayling del Royal College of Art, y el español Rafael de España de la Universitat de Barcelona, se llevó a cabo el pasado jueves 22 y viernes 23 de enero el Coloquio la revolución mexicana y el cine italo-europeo, centrado en el llamado subgénero spaghetti-western, pero aquel que se asomó a la revolución mexicana como pretexto, tema y ambiente.
El coloquio, celebrado en las instalaciones de El Colegio de México, permitió aproximarse a los análisis que los especialistas brindaron sobre la obra de destacados cineastas, como Sergio Leone y Damiano Damiani, directores de filmes significativos que abordan la revolución mexicana como Giù la testa (1971) y El Chucho ¿Quién sabe? (1966), respectivamente. La revisión de este conjunto de filmes permitió reflexionar sobre el origen, los códigos y la iconografía del spaghetti western, así como la forma en que éste asimiló, a través de la lente europea de los años sesentas, una serie de estereotipos de lo mexicano y del ambiente de la revolución, cargadas con el espíritu contestatario de la época y la originalidad de los realizadores que filmaron esas tramas sobre todo en España e Italia.
Así, resultó llamativo para los asistentes al coloquio la revelación de detalles sobre algunas películas poco conocidas en México, algunas presuntamente censuradas en el país, como El Chucho, con Gian María Volanté, Klaus Kinsky, Lou Castel y Jaime Fernández, o como Il Mercenario (1968), de Sergio Corbucci, con Franco Nero y Jack Palance, que presentan una visión de la revolución mexicana a veces controversial, a veces irónica, y siempre curiosa.
Otros participantes de este coloquio fueron Adela Pineda, Montserrat Algarabel, Ariel Rodríguez Kuri, Hugo Lara, Marco Bellingeri, Alicia Azuela, Bernd Hausberger y Raffaele Moro, estos dos últimos también organizadores del acto. Se trata de un primer acercamiento a este tema y subgénero que derivará, en los siguientes meses, en exhibiciones en otros espacios públicos y festivales, así como en la edición de un libro y una exposición en 2010.