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Madrid. 2010 ha sido un mal al año para los propietarios de las salas en
España. Según datos de la medidora de audiencias Rentrak comentados por
Variety, se registró una perdida del 10% en el número de espectadores,
aunque gracias al mayor coste de las entradas para salas en 3D y las
subidas habituales de precios, los ingresos monetarios sólo perdieron
un 3% sobre 2009. El pasado octubre, y a pesar del “estirón” en noviembre y diciembre,
las cifras son aún más alarmantes para la producción nacional, que
según los cálculos de la web especializada BoxOffice habrían caído un
40%. El Ministerio de Cultura y la Federación de Asociaciones de
Productores (FAPAE), mantienen un silencio sepulcral…
Y éste no es nuevo. El departamento que dirige la guionista Angeles
González-Sinde no actualiza sus cifras de taquilla y espectadores desde
el 30 de junio, cuando habitualmente la web del Instituto del Cine
(ICAA) las publicaba con un retraso de no mucho más de mes y medio.
Desde el verano no hay información oficial sobre el tema. Tampoco los
productores en sus comparecencias más recientes han hecho mención al
descenso de la cuota de mercado. Preguntado por NOTICINE.com el pasado
noviembre en Huelva, el responsable de la sociedad de gestión de
derechos de los productores (EGEDA), Enrique Cerezo, decía que el cine
español y sus cifras estaban muy supeditadas a las obras de
determinados cineastas, como Almodóvar o Amenábar, y en este año pasado
ninguno de ellos había estrenado película, a la par que culpabilizaba a
la piratería.
Tanto la directora de comunicación como el
presidente de FAPAE, Pedro Pérez, se encuentran de vacaciones hasta el
próximo lunes y no han podido responder a nuestras llamadas.
En
cualquier caso, y a falta de datos oficiales o respaldados por los
productores, 2010 podría confirmarse como no sólo peor que el
precedente en taquilla para las películas españolas en su conjunto,
sino incluso el de menor cuota de mercado de la década.
Volviendo
a la taquilla en general, durante la primera mitad del año, sin embargo
-y gracias fundamentalmente al fenómeno “Avatar”- los números iban en
un sentido justamente contrario al final, según Rentrak un 10% más,
pero durante el verano y especialmente en junio y julio por el Mundial
de Fútbol, los cines quedaron desiertos, sin que llegaran realmente a
recuperarse en el otoño, de ahí ese balance final tan negativo.