Escondida, La

Situada en una hacienda pulquera de Tlaxcala a fines del porfiriato, la trama se centra en la campesina Gabriela (María Félix), cuya belleza y arribismo provoca la molestia de las otras mujeres que venden aguamiel. Su novio, Felipe (Pedro Armendáriz), peón tlachiquero, trata inútilmente de satisfacerla, a pesar de los consejos de sus amigos que desconfían de ella por su ambición y sus caprichos. El maltrato y las condiciones de injusticia por parte de los hacendados hacen que Felipe decida escapar con Gabriela, pero un incidente se los impide y el hacendado lo manda con la leva que hace el ejército. Tiempo despùés, Felipe regresa a la hacienda y se entera que Gabriela se ha ido, atraída por una vida mejor. Decepcionado, se organiza con su padre Tata Agustín (Domingo Soler), su amigo Máximo Tepal (Jorge Martínez de Hoyos) y sus demás compañeros mientras les llegan noticias del levantamiento revolucionario de Francisco Madero, Pancho Villa en el norte y Emiliano Zapata en el sur. En paralelo, el nuevo gobernador de Tlaxcala, Nemesio Garza (Andrés Soler), llega al estado junto a Gabriela, su amante, quien se ha refinado como cortesana y a quien la gente llama “La escondida”. Felipe, Máximo, Tata y sus compañeros, se agrupan en torno al doctor Herrerías, quien simpatiza con Madero y promueve su causa. Casualmente, Felipe descubre que se trata de ella. Despechado, llama a sus compañeros a levantarse en armas. El gobernador logra reprimirlos cuando atacan por sorpresa el tren en el que viajan y toman prisionero a Felipe, al que clavan contra un maguey. Los campesinos contraatacan, logran triunfar y liberan a Felipe, quien se reencuentra con Gabriela, a la que posee violentamente. Pasa el tiempo y la revolución maderista triunfa. Felipe acepta entregar las armas, a pesar de que su compadre Máximo desonconfía y decide continuar la lucha. Felipe y Gabriela viven un momento de gloria cobijados por el triunfo de Madero,  una luna de miel donde él ha conseguido reconocimiento, lujos y la felicidad al lado de ella, pero es comisionado a combatir a Máximo que sigue causando estragos en Tlaxcala. Gabriela convence a Felipe que vaya a dialogar con Máximo y le promete encontrase con él si decide quedarse con ellos. Felipe regresa a la hacienda pulquera para reunirse con Máximo, quien le hace ver que la recolución no ha triunfado todavía, ni las promesas de justicia y tierras para los campesinos. Felipe, cuando observa a los revolucionarios que llegan a caballo para combatir, le da la razón, se despoja de su uniforme oficial y se une de nuevo a los revolucionarios, al grito de ¡viva Zapata!. Felipe, a la cabeza de los zapatistas, atacan un tren sin saber que en él viaja Gabriela, quien perece a causa de las balas revolucionarias. Felipe se despide de ella con dolor y continúa su marcha con los revolucionarios.(sinopsis de Hugo Lara)