El filme Voy a explotar
se presentó en el 65 Festival de Venecia, fuera de competencia, donde
el cineasta mexicano Gerardo Naranjo recibió más de 10 minutos de
aplausos por parte del público y crítica, al presentar su película.
El director declaró a los medios su sorpresa y emoción ante la entusiasta reacción del auditorio.
Además, el filme de Naranjo fue
invitado a formar parte de la programación de los festivales de Nueva
York (en su edición 46, que se realizará del 26 de septiembre al 12 de
octubre) y de Toronto (del 4 al 13 de septiembre).
Gerardo Naranjo reconoció que a pesar del gran recibimiento en el festival fílmico, no significa su venta rapidísimo.
Respecto
a la cinta Naranjo comentó que el tema eje es la rebeldía. El interés
del cineasta es “hablar sobre qué es la rebeldía en la actualidad, cuál
es la percepción de ser rebelde hoy”, en el contexto de que hay hasta
un grupo pop llamado Rebelde que lo último que simboliza es lo que
lleva en el nombre, en el que “los símbolos de la contracultura o de la
rebeldía, como los tatuajes, los trae Kalimba (de OV7) o Britney
Spears, ya fueron asimiladas en nuestra cultura y de manera muy ‘sana’,
ya no hay nada que distinga a los que están en contra y los que están
en favor”.
La
cinta está ambientada en Guanajuato y trata sobre dos adolescentes,
Román y Maru (Juan Pablo de Santiago y María Deschamps), que escapan de
sus casas.
El
discurso principal de la película es que no hay ningún enemigo de los
jóvenes. No se rebelan ante la injusticia, sino ante el hecho de que no
tienen nada por lo cual pelear. Crean un enemigo, porque no hay nadie
que esté en su contra, pero tampoco hay alguien que los provoque en
favor. Hay tanta inmovilidad que deciden crear un enemigo. La única
manera en que lo pueden lograr es escapándose y convirtiéndose en outlaws, forajidos a la fuerza”.
La
película se mueve en dos ámbitos: “Los chicos tratando de encontrar un
significado a su escape, intentando dar la cara al enemigo, y, la otra,
de los adultos, de esta sociedad conservadora”, en la cual “el papá,
que es político, está preocupado, sobre todo, por la percepción social
de que su hijo ande con una pistola y disparando a lo loco” y “la mamá
de ella está más preocupada de que ande con un chaval sexualmente
activo, y quiere que parezca que fue un rapto”, no que huyeron.
La pareja protagonista es personificada por dos estudiantes de secundaria de la ciudad de México, quienes jamás habían actuado.
Los otros papeles importantes son interpretados por Daniel Giménez Cacho, Rebeca Jones y Martha Claudia Moreno.
La
cinta es una coproducción de Canana Films, Cinematográfica Revolcadero,
Verisimilitude (Estados Unidos) y Fidecine, en asociación con Wild
Bunch (Francia).