Por Perla Schwartz
Alberto Gout (1907- 1966) fue un director que se especializó en un subgénero del cine cabaretil o cine de rumberas. Él es autor de varios filmes memorables como “Sensualidad” (1950), “En carne viva” (1950), “Mujeres sacrificadas” (1951) y “Aventura en Río” (1952), entre otras.
Pero este rubro, su mejor película, la más reconocida por la crítica nacional e internacional (Francois Truffaut, la defendió contra capa y espada en “Cahiers du Cinema”) es “Aventurera” (1949), que recientemente formó parte del ciclo “Rumba de Verano”, organizado por Cineteca Nacional.
Aquí Ninon Sevilla tiene a su cargo el personaje de la inocente Elena Tejero que por azares de la vida y vueltas de tuerca del destino se convertirá en una prostituta. La historia escrita por Álvaro Custodio con un innegable manejo maestro del crescendo dramático fusiona elementos clásicos del melodrama arrabalero con trazos del cine negro.
La acción se inicia en una inhóspita Ciudad Juárez, Elena está a punto de casarse, es recatada y modesta, pero tras el suicidio de su padre, al haber corroborado la infidelidad matrimonial por parte de su mujer, Elena (Ninon Sevilla) desprotegida y antes de andar por la vida a la deriva, acepta el ofrecimiento de Lucio el guapo (Tito Junco, impecable) de un nuevo trabajo.
La muchacha, nunca sospechará que será conducida a una casa de citas, regenteada por la enérgica Rosaura (una maravillosa Andrea Palma), mujer cruel que lleva una doble vida, que muy pocos saben, ella se encargará de humillar a la chica, pero el tiempo le permitirá a ésta tomar la revancha.
No se trata de contar la historia, pero si de entusiasmar al espectador de ver o volver a visionar una de las joyas del cine nacional, con una gran factura que se fundamenta en la dirección de actores por parte de Gout y los claroscuros de la lente fotográfica de Alex Phillips, sin poder dejar de lado las maravillosas coreografías, donde Ninon canta y baila como “pez en el agua”.
Pero sobre todo la canción tema “Aventurera”, interpretada por Don Pedro Vargas: “Vende caro tu amor aventurera…”, lo que permite el despliegue de una de las escenas antológicas de nuestro cine, Ninon fuma, escucha conmovida y llora.
A pesar que algunos diálogos suenan grandilocuentes, “Aventurera” es una gran película, que redime a la protagonista, tras varios sufrimientos puede hallar un horizonte de luz y ello es muy valioso, y uno de sus grandes valores es la gran interpretación de Andrea Palma, sin lugar a dudas una de las grandes actrices de nuestra cinematografía. Así como la inolvidable interpretación de Miguel Inclán como Rengo.
Habrá otra oportunidad de ver en pantalla grande este filme memorable en el ciclo “Las imprescindibles de Monsiváis” que inicia el próximo 31 de agosto, también en Cineteca Nacional.
Aventurera
México, 1949. Dirección: Alberto Gout. Guión: Álvaro Custodio. Fotografía: Alex Phillips. Música: Antonio Díaz Conde. Intérpretes: Ninon Sevilla, Andrea Palma, Tito Junco, Rubén Rojo, Miguel Inclán. Duración: 103 minutos.
