Por Daniel Ramírez
Beto “Rudo” tiene el gran sueño de convertirse en un gran futbolista, Tato “Cursi” quiere llegar a ser un cantante de música norteña. Batuta es un caza talentos de fútbol quien se topa con el par de hermanos y aprovecha la situación para explotar las minas de oro que se le presentan.
Tato desarrolla su carrera como futbolista y al mismo tiempo, la de cantante semifracasado y “esclavo del amor”; por su parte Beto emprende un camino exitoso como portero de un equipo y a la par se convierte en un un apostador compulsivo. Cada uno de los hermanos lleva su vida a los excesos y como consecuencia, se presenta un declive de los sueños.
No se puede dejar fuera las referencias que existen entre la obra de Carlos Cuarón y la de su hermano Alfonso, como el manejo de algunas tomas en las que es inevitable hacer la comparación entre Rudo y cursi y el filme Y tu mamá también. Rudo y cursi es una comedia que aplica bien la fórmula comercial y por lo tanto una cinta que funciona como mero entretenimiento.