Por Daniel Ramírez y Jeny Gómez
Victor Ugalde, Presidente de la Asociación Mexicana de Directores y Realizadores, manifestó que no hay ninguna política de distribución ni de exhibición que evite las practicas contrarias al libre comercio que ejercen empresas como Cinépolis, Cinemark y Cinemex; por ello, lo que se vislumbra en el panorama nacional fílmico es algo lejano a una industria cinematográfica. Lo anterior durante su intervención en el panel Horizontes del cine mexicano programada dentro del Ciclo Perspectivas del Cine Mexicano efectuado el viernes 7 de noviembre en la Sala José Revueltas, del Centro Cultural Universitario. Participaron también Amanda Sucar, Coordinadora de Difusión de Ambulante; Icela Flores, de la Distribuidora de Cine Alphaville, y el director de cine Gustavo Moheno. El tema principal de la ponencia fue el rumbo del actual cine mexicano. Ugalde, también Secretario Técnico del FIDECINE se preguntó en tono pesimista “¿qué es eso?” de Horizontes del cine mexicano, pues consideró que el escenario del cine mexicano debería dejar de ser gobernado por lo que impone la Secretaría de Hacienda a través del presupuesto destinado por esta entidad al rubro cultural en general y al cinematográfico en particular. Externó también que estrenar una película se ha vuelto la etapa más difícil de la cadena productiva del cine nacional ya que hay una gran desventaja de los distribuidores ante los grandes exhibidores, puesto que “estos últimos son quienes se quedan con la parte más grande del pastel, por lo que debería establecerse una legislación que permita un buen tiempo de exhibición así como una buena fecha para el cine nacional”. Agregó que “Hay una gran contrariedad en el proceso de exhibición de una película, quienes ganan primero son los exhibicionistas, después los distribuidores y si les va bien los productores alcanzan a recuperar el 10% de lo que invirtieron, entonces es toda una aventura para quienes se dedican al cine”. Por su parte, Amanda Sucar afirmó que el género documental se ha vuelto un platillo cada vez más demandado dentro del menú de cine a nivel comercial: “en febrero cumplimos la cuarta edición de la gira (de documentales Ambulante) con un éxito bastante considerable; en tres años, la cantidad de espectadores se triplicó”. La Coordinadora de Difusión de Ambulante mencionó que ahora hay más apoyos para quienes deciden realizar documentales; incluso se cuentan con becas como la que Canana, productora de de la gira, otorga en conjunto con la firma Gucci. Sucar sostuvo que la principal meta de Ambulante es buscar un espacio para este género, así como exhibir los trabajos y buscar una remuneración para los realizadores. Durante su intervención, Icela Flores presentó datos estadísticos alrededor del documental, en los que las cifras mostraron un horizonte desolador para el género. Aseguró que los espacios para la exhibición de los documentales suelen ser muy agresivos a la hora de las cuentas en pesos. Sin embargo, afirmó que las rentas y las ventas en DVD son un factor importante en la recuperación de la inversion hecha en un documental. Por último, el director del remake Hasta el viento tiene miedo, Gustavo Moheno, compartió con el público asistente su experiencia dentro de la filmación de la película, cómo se llevó a cabo la adaptación del nuevo guión, y cómo pudo llevar a cabo el proyecto. El tercer y último panel se realizará este miércoles 12 de noviembre en la misma sala, a las 18.30 horas, bajo el título Nuevas tendencias del cine mexicano, y contará con la participación de los productores Roberto Fiesco y Sandro Halphen; el director del CUEC Armando Casas, y el Director de Producción de Warner-Cine México, Leonardo Zimbrón.