Por Cynthia García Calvo
  

EscribiendoCine-CorreCamara.com
  

La vida de una mujer ordinaria que transforma una tragedia personal en una lucha extraordinaria. Eso es lo que busca retratar el debutante Nicolás Gil Lavedra en “Estela”, el film sobre la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, que está concluyendo un rodaje acotado e intenso con Susú Pecoraro en el rol central.
  

“No hay torturas, ni Falcón verde; la historia pasa por otro lado”, afirma Gil Lavedra a EscribiendoCine en un alto del rodaje que se desarrolla en uno de los edificios de la ex ESMA, sentado en la misma silla donde minutos antes Pecoraro interpretó una de las escenas que estructuran la película.
  

“Estela” se narra sobre la base de lo que es el archivo biográfico, esas pequeñas entrevistas que un grupo de jóvenes realizaron con los familiares y amigos de los desaparecidos para hablar de intimidad y personalidad. Así se busca entregar a los nietos encontrados “un pedacito de su historia que a ellos les puede ayudar a conocer a estos papás que ya no van a conocer”, tal como apunta María Laura Gargarella, autora del guión junto a Jorge Maestro.
  

Gargarella fue convocada para aportar un punto de vista femenino a la historia, cuya primera dificultad fue encontrar el modo de “condensar tantos años de la vida de una persona, y tantos años con tantos acontecimientos”. La guionista detalla: “El recorte era muy complejo: desde qué punto de vista contarlo, dónde abordarlo y cómo volver a transitar por una época que ya está transitada pero tratando de no caer en los mismos puntos o en lo que ya está demasiado visto. Probamos muchos puntos de partida charlando con Nico. Hasta que un día, lo más iluminador, fue cuando vimos en Página/12 una nota sobre el archivo biográfico y nosotros no sabíamos bien qué era. Cuando nos interiorizamos fue encontrar la puerta. Eso nos pareció un material precioso y sensible para trabajar a partir del marco del cual estructurar toda la historia”.
  

Una de las búsquedas del director es abordar la biografía desde un lugar cercano, identificable: “Me parece que eso realza más el personaje. Si yo parto de la base que Estela de Carlotto es una santa, le pongo una distancia tan grande que no me sirve. Si parto de la base que Estela de Carlotto es una mujer común que frente a distintas situaciones puedo encontrar distintos elementos en donde reafirmar su personalidad o ganar nuevos mecanismos para combatir lo que le pasaba de otra manera, me parece que entendemos de verdad quién es Estela de Carlotto. La de hoy ya la conocemos, pero la que era no la conoce nadie. Entonces lo interesante es plantarnos primero en esta mujer, esposa y madre, y después empezar a mostrar nuevos rasgos, que son los que van a ir apareciendo de a poquito y terminar muy bien resaltados al final”.
  

Para Gil Lavedra, una de las falencias del cine argentino es que “en muchas ocasiones lo que ha hecho fue poner mucha distancia” al abordar temas relacionados con la dictadura militar, por lo que su intención es acercar lo más posible los años 70 para que “la historia puede llegar de otra manera a la gente”.
  

Pero su film también busca reflejar otras situaciones similares que conllevan una tragedia personal y familiar: “La historia acá pasa por la intimidad de una familia que es atravesada por el destino. Y es la vida puntual de esta mujer, que a la vez puede ser cualquier abuela, cualquier madre o cualquier mujer que ha tenido una pérdida muy fuerte frente a cualquier tipo de injusticia: gatillo fácil, secuestro… No es solamente frente a una dictadura. Acá el marco político es ese”.
  

Agrega Gargarella: “Y habla de una decisión de vida, de cómo una persona actúa frente a la tragedia. Ella podía tirarse en la cama a llorar y no levantarse más, que uno lo podría entender, pero lo extraordinario acá es cómo un contexto de tanta muerte y acontecimientos tan dolorosos, ella los transforma en un camino de lucha y el triunfo de la vida sobre todo este daño”.
  

Al ser consultado por su protagonista, Gil Lavedra no tiene más que palabras de elogio para Pecoraro: “Vi diez minutos de “Roma” y supe que era Susú. Fue la primera actriz en la que pensamos. Puso el alma, el corazón y la energía desde enero, dos meses antes de la preproducción, para juntarse con Estela, conmigo y con los guionistas para ver si había algo, tal vez un matiz más para agregarle. Hizo también un trabajo con el coach Willy Lemos más que nada por movimientos. Está tan metida en el personaje que ya le sale todo en la primera o segunda toma. A veces dice: ‘me parece que en este movimiento no fui la Estela que estamos creando’. La verdad es un placer en todo sentido”.
  

“Estela” es una producción de Aleph Media en asociación con Nut´s Studios que tiene como productor a Fernando Sokolowicz. El elenco incluye a Inés Efrón, Alejandro Awada, Laura Novoa y Carlos Portaluppi, entre otros. Su estreno es Argentina está previsto para el 15 de septiembre de 2011.